Empleados del vertedero municipal de Artigas localizaron un cadáver a las cuatro menos cuarto de la madrugada de ayer mientras realizaban el pesaje de la basura transportada hasta allí por uno de los camiones de recogida lateral que cubren la ruta de Abando, Indautxu y Rekalde. El cuerpo pertenecía a un joven de origen argelino, identificado por la Ertzaintza como A.R., de 26 años.

El primer informe forense apunta a que la muerte pudo producirse por «aplastamiento». Los investigadores de la Policía autónoma sospechan que el individuo se quedó dormido en el interior de un contenedor y que falleció «en el transcurso de las labores que efectúa el camión desde la recogida del container hasta su depósito en el vertedero», señaló el Departamento de Interior, que atribuye el suceso a un «fatal accidente».

A.R. debió de introducirse en uno de los depósitos para restos orgánicos de la zona centro. El camión que ‘engulló’ al joven inmigrante había iniciado su trabajo a las diez y veinte de la noche del lunes en la calle María Díaz de Haro y, tras pasar por Sabino Arana, Luis Briñas, Avenida del Ferrocarril y plaza de la Casilla, entre otras calles, se dirigió al depósito de Artigas. Los operarios de la limpieza acostumbran a golpear en las paredes del contenedor para alertar a posibles intrusos. No obstante, los indigentes que pernoctan en contenedores, generalmente en invierno para huir de las bajas temperaturas o de la lluvia, suelen elegir como refugio los de papel y cartón, libres de malos olores. Sin embargo, A.R. – al parecer, con problemas de alcohol – , se introdujo en uno de basura orgánica.

El vehículo vertió doce toneladas de restos en el primer viaje, alrededor de la una de la madrugada, y ocho toneladas en el segundo, a las tres y veinte. Poco después, cuando los operarios seleccionaban y trituraban los desechos encontraron el cuerpo y avisaron al 112, que movilizó a patrullas de la Ertzaintza y de la Policía Municipal de Bilbao. El levantamiento del cadáver, que fue trasladado al servicio de Patalogía Forense de la Audiencia vizcaína, se produjo alrededor de las seis de la mañana, indicaron fuentes municipales.

Varios casos más

Por desgracia, no es la primera vez que realizaban un descubrimiento tan macabro. De hecho, el concejal de Obras y Servicios del Ayuntamiento de Bilbao, José Luis Sabas, se mostró ayer «preocupado» por la repetición de varios casos similares en los últimos meses. El pasado 18 de febrero, otro joven magrebí de 27 años – A.B.E. – fue encontrado muerto en la ribera de Zorrozaurre al vaciar un camión su carga de papel y cartón en la empresa Papeles Nervión. El ‘sin techo’ debió de fallecer aplastado o asfixiado debido al continuo ‘empuje’ al que se ven sometidos los materiales en estos vehículos de recogida lateral con cámaras. En ellos, el conductor activa el mecanismo al pulsar un simple botón.

Ese mismo día, otro chico se salvó de morir triturado gracias a que el ruido del camión y los toques de los recogedores le despertaron cuando dormía dentro de un container junto a las escaleras de Uribitarte.