Un jurado compuesto por seis mujeres y cinco hombres juzgará de nuevo a José David Fuertes, portero de discoteca de 29 años.Está acusado de la muerte del menor angoleño Ndombele Augusto Domingos, de 16 años, ocurrida el 20 de julio de 2002 a las puertas del pub Inn, situado en la calle de Polvoranca de Alcorcón. Es la segunda vez que Fuertes se sienta en el banquillo por el caso Costa Polvoranca. La primera fue absuelto pero la sentencia fue anulada.

El fiscal solicita 13 años de cárcel para Fuertes por un delito de homicidio, mientras que la acusación popular, ejercida por el Movimiento contra la Intolerancia, pedirá 20 años de prisión.Esa es la misma pena que exige la acusación particular en representación de la familia de la víctima por asesinato con la agravante de haber cometido el delito por motivos racistas y con abuso de superioridad.

El acusado, vestido con un traje negro y cubriendo sus manos esposadas con una toalla, llegó sobre las 09.30 horas de ayer a la Audiencia madrileña en un furgón de la Guardia Civil. Al entrar en el edificio proclamó a gritos su inocencia, asegurando que la situación que está padeciendo «es una injusticia».

Los padres del joven asesinado, Filomeno Wzama y Paulina Kikawanakio, volvieron a reclamar ayer justicia al llegar a la Audiencia.Visiblemente afectado, Filomeno aseveró que, a pesar de todo lo que ha sufrido, cree en la Justicia. El padre del joven asesinado dijo que el primer jurado que juzgó a Fuertes se equivocó. «No creo que el nuevo tribunal se vuelva a equivocar porque el caso está muy claro», dijo a Europa Press.

Por su parte, Paulina manifestó que seguirá el juicio por la muerte de su hijo desde la Sala de vistas para demostrar que no tiene miedo de José David. La madre y el padre, muy alterados, destacaron que Fuertes «siempre va a decir mentiras». «¿Cómo va a decir que es inocente cuando el amigo de mi hijo le vio apuñalar a Ndombele? Puede que no viera el cuchillo, pero le vio chorrear sangre. Él es que mató a mi hijo», concluyó el padre de la víctima entre lágrimas.

El presidente de Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, se mostró «muy esperanzado» ante la repetición del juicio. Señaló a Efe que sólo piden justicia «ante este crimen por odio y horroroso por el que llevamos luchando cuatro años». «Ndombele sólo medió en una pelea pero no sabía que estaba ante dos cabezas rapadas que odian a los negros. El único motivo de la agresión fue su color de piel», precisó. Ibarra consideró que este caso ha sido «insólito», refiriéndose a las declaraciones falsas de dos de los testigos en el primer juicio, en el que «no se valoraron pruebas de cargo», como el testimonio del amigo de la víctima que presenció la agresión.

En octubre de 2004 un jurado popular de la sección sexta de la Audiencia madrileña declaró a José David Fuertes no culpable de los delitos de homicidio y asesinato que se le imputaban.Los miembros del jurado consideraron que no había quedado acreditado que fuera el autor de las puñaladas que costaron la vida a Ndombele.

Sin embargo, esta sentencia fue recurrida por las partes y anulada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) y por el Tribunal Supremo, ordenando la repetición del juicio oral a Fuertes con distinto magistrado presidente y con un nuevo tribunal popular.

El TSJM resaltaba que la resolución absolutoria no daba credibilidad a la declaración de los dos testigos que afirmaban haber visto los hechos (a Fuertes asestando las cuchilladas al joven angoleño).En cambio, sí otorgaba verosimilitud a otros testigos que afirmaron que sólo habían presenciado lo que ocurrió cuando la víctima estaba ya herida, según Efe.

Además, el presidente de la sección quinta de la Audiencia Provincial, Arturo Beltrán, denunció en la sección sexta (que celebró el juicio) un posible falso testimonio de dos testigos que declararon en la vista. El padre de uno de ellos llamó por teléfono al juez y le dijo que ambos habían mentido al asegurar que vieron al acusado dar un bofetón al menor fallecido y marcharse.

Primera declaración

Por este motivo, según Ibarra, la acusación popular se está planteando solicitar la comparecencia en calidad de testigo del magistrado Arturo Beltrán que denunció a los testigos falsos.

Tras hacerse pública la resolución del TSJM de repetir el juicio se ordenó la búsqueda, captura e ingreso en prisión de Fuertes, que después de conocer el fallo huyó de la Justicia. José David se entregó el 7 de abril del pasado año.

El juicio a José David Fuertes continuará hoy con la declaración del procesado. También están citados para mañana Jesús María, el amigo de Ndombele que presenció los hechos, y María del Mar C.G.

Según el fiscal, el 20 de julio de 2002 se inició una discusión entre, Jesús María, un amigo de Ndombele y Pablo G. Tras la pelea Pablo se metió en el pub Inn. Luego regresó acompañado de José David Fuertes que asestó dos puñaladas a Ndombele sin mediar palabra.