Unos 180 inmigrantes fueron desalojados este martes a primera hora de la mañana por la policía de un edificio que ocupaban desde 2016 en la ciudad de Lille (norte de Francia), en aplicación de una decisión judicial.

En un comunicado, la Prefectura (delegación del Gobierno) explicó que las fuerzas del orden iniciaron la evacuación de lo que se conocía irónicamente como “squat cinco estrellas” a las 6.00 locales (4.00 GMT) en ejecución de un dictamen del Tribunal de Gran Instancia de Lille de julio de 2018.

La operación, según la Prefectura, tenía un triple objetivo: responder a la “urgencia sanitaria” a la vista de las “condiciones de vida indignas e insalubres” de los inmigrantes , ofrecer a las personas en situación regular “un alojamiento adaptado” a su situación y expulsar a los que no tienen papeles en regla.

Además, subrayó que poner fin a esta ocupación dificultará los manejos de las “redes criminales de traficantes que comercializan la desesperanza” y utilizan este tipo de lugares para sus acciones.

Las personas desalojadas fueron trasladadas a diferentes Centros de Retención Administrativa, Centros de Acogida de Demandantes de Asilo y Centros de Acogida y de Orientación.

La delegación del Gobierno justificó esta “política de firmeza hacia la inmigración irregular” porque es “una condición indispensable para cumplir nuestro deber republicano hacia los que huyen de las guerras y de las persecuciones”.