?l Gobierno español pidió ayer apoyo a la UE para luchar contra la inmigración ilegal procedente de África, después de que en los últimos días se haya batido el récord de indocumentados que han alcanzado las costas de las islas Canarias a bordo de cayucos. Por eso, el Ejecutivo ha solicitado a la Agencia Europea para el Control de Fronteras Exteriores (Frontex) apoyo logístico, el envío de expertos en la materia y la creación en el archipiélago español de una delegación de este organismo, que coordine y controle las fronteras.

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Estas medidas fueron presentadas ayer por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Ésta subrayó que la próxima semana viajará a Bruselas para entrevistarse con el presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso, y con varios comisarios de la Unión para acelerar toda estas medidas. De la Vega recordó que una delegación del Parlamento Europeo visitará a principios de junio Tenerife y Fuenteventura para ver la dimensión que el problema de la inmigración ha causado.

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El Consejo de Ministro también estudió ayer un informe de Asuntos Exteriores en el que se plasman las líneas principales del Plan África 2006 – 2008, que tiene como objetivo luchar contra la inmigración ilegal que viene de este continente. El plan contempla cuatro ejes de acción: potenciar el control fronterizo, reforzar los procedimientos de repatriación inmediata, crear nuevas embajadas y delegaciones en los países subsaharianos y cooperar con el desarrollo económico y la democracia en esta zona del continente.

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Entre las actuaciones concretas de este plan figuran la apertura de embajadas en Malí, Sudán y Cabo Verde, que se sumán a las diecisiete ya existentes en la zona. Además, se crearán oficinas técnicas de cooperación en Cabo Verde, Etiopía y Malí y se reforzarán las agregadurías de Interior en países como Ghana, Nigeria y Senegal.