Más de 3.000 migrantes atrapados en condiciones inhumanas en Libia, según MSF

La Vanguardia, Trípoli, 9 may (EFE), 10-05-2019

Más de 3.000 migrantes y refugiados se hallan atrapados en centros de detención de Trípoli en condiciones inhumanas, con escasez de agua y alimentos básicos y proclives a las enfermedades mentales, denunció hoy la organización Médicos sin Fronteras (MSF).

En un comunicado para la prensa, la ONG internacional recordó que la mayoría de estas personas llegaron a Libia huyendo de la guerra y la miseria en sus propios países y que se necesita una solución para que no opten por alternativas peligrosas y desesperadas.

“Escuchamos el estruendo de las armas. A veces las paredes tiemblan. Así vivimos”, explica en la nota Abraham, uno de esos migrantes que se hallan en centros de detención de Qasr Bin Gashir, Abu Salim y Sabaa, corazón de los combates.

Los enfrentamientos estallaron el pasado 4 de abril en el sur de Trípoli después de que el mariscal Jalifa Hafter, el hombre fuerte de Libia, anunciara el inicio de una campaña militar para conquistar la ciudad y arrebatar su control al Gobierno reconocido por la ONU con sede en la capital.

Desde entonces, ambos contendientes luchan en torno al antiguo aeropuerto internacional de Trípoli en un combate en el que han muerto más de 400 personas, cerca de un millar han resultado heridas y miles más se han visto obligadas a desplazarse de forma interna.

Los combates han afectado igualmente a los miles de migrantes que están confinados en centros de detención de Trípoli y a los que organizaciones como MSF intentan trasladar a lugares más seguros en el norte de la ciudad.

“La mayoría de estas personas llegan a Libia huyendo del hambre, la persecución, la pobreza y los conflictos bélicos para verse atrapadas nuevamente en una situación similar a la de sus países: más violencia, nuevos enfrentamientos, falta de alimentos, agua, atención médica y otros servicios esenciales” recuerda MSF.

“Varios centros de detención se encuentran en estos barrios y están peligrosamente cerca de las líneas del frente. Debido al uso de armas pesadas y a la dinámica cambiante de conflicto, todas las personas en estos centros corren un riesgo inminente al verse impedidas para buscar refugio seguro por sí mismas”, agrega.

A la violencia se suman las dificultades para acceder a alimentos básicos y agua, lo que se ha convertido “en una de las principales preocupaciones de MSF”.

“La organización ha recibido informes alarmantes de que la provisión de alimentos para los refugiados y migrantes detenidos se ha visto obstaculizada significativamente durante los combates. Algunos detenidos denuncian no haber comido durante varios días”, afirmó.

Los equipos médicos de MSF también han constatado un gran aumento de las enfermedades mentales, fruto de la desesperación de hombres, mujeres y niños que no ven esperanza de futuro tras años huyendo de la guerra para caer en la guerra.

“Hemos recibido informes cada vez más angustiosos de personas en un centro de detención que se encuentran en tal estado de desesperación que han considerado quitarse la vida, o ya lo han hecho. Estas personas suplican que alguien les ayude”, explica el coordinador general de MSF en Libia, Sam Turner.

Ante esta situación, MSF “insiste en que todos los refugiados y migrantes que se encuentran en los centros de detención de Trípoli deben ser evacuados de inmediato fuera del país debido al grave riesgo de muerte y de resultar atrapados en el fuego cruzado de un conflicto que no hace más que empeorar”.

“Esta urgente evacuación humanitaria solo puede realizarse si países seguros como España y otros Estados miembros de la UE ofrecen refugio a estas personas, a las que no les queda otra alternativa para buscar seguridad”, subrayó.

“Además, las partes del conflicto deben garantizar que los civiles y la infraestructura civil estén protegidos. El personal médico y humanitario debe ser respetado y protegido en cualquier circunstancia”, concluyó. EFE

mak-jm/si

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)