El senado de eeuu apoya a bush y la seguridad junto a méxico

Canarias 7, 18-05-2006


Washington
El Senado de Estados Unidos rechazó ayer iniciativas sobre seguridad fronteriza y para excluir a inmigrantes indocumentados recién llegados de un programa de trabajadores temporales propuesto por el presidente George W. Bush. Dos propuestas, presentadas por republicanos y demócratas, fueron rechazadas en votación.


La propuesta para reforzar la frontera sur antes de efectuar otros cambios al sistema de inmigración presentada por el senador republicano Johnny Isakson fue rechazada por 55 sufragios a favor y 40 en contra con el voto unido de republicanos y demócratas.


Horas después, el senador demócrata Byron Dorgan propuso excluir a inmigrantes indocumentados recién llegados al país del programa de trabajadores temporales planteado el lunes por el presidente Bush. Esa iniciativa fue rechazada por 69 votos contra 28.


Los resultados de ambas votaciones constituyeron un triunfo para los legisladores que apoyan la idea de Bush de combinar un refuerzo de la vigilancia fronteriza con un sistema para otorgar la ciudadanía estadounidense a muchos inmigrantes que viven en el país de forma ilegal.


La propuesta de Bush también establece el envío a la frontera con México de unos 6.000 efectivos de la Guardia Nacional.


«Fue un buen comienzo», señaló el senador demócrata Ken Salazar, al referirse a los primeros escarceos del debate migratorio en la cámara alta que debería concluir con la aprobación de un proyecto antes de finales de este mes.


El proyecto de ley del Senado asigna fondos para reforzar la seguridad fronteriza, para un programa de trabajadores temporales y una oportunidad de ciudadanía para la mayor parte de los 12 millones de extranjeros que viven de forma ilegal en EEUU. Ese proyecto contrasta con uno aprobado a finales del año pasado por la Cámara de Representantes que convierte en delincuentes a los inmigrantes indocumentados y a quienes les ayuden o les den trabajo en Estados Unidos.


Una vez que se apruebe la del Senado, ambas versiones deberán ser armonizadas en un solo proyecto para su promulgación como ley por parte del presidente Bush.


La idea de otorgar ciudadanía a muchos inmigrantes parece haber tenido escasa aceptación entre muchos republicanos en la Cámara de Representantes.


«Los intentos velados de promover una amnistía no se pueden tolerar», dijo el representante Tom Price.


«Aunque EEUU es una nación de inmigrantes, también somos un país de leyes y recompensar a quienes violan nuestras leyes deshonra el arduo trabajo de aquellos que han llegado ilegalmente y no resuelve en nada la actual situación», agregó.


Además, el Senado de EEUU aprobó una enmienda que excluye de un eventual programa de legalización a extranjeros con antecedentes criminales, dentro de un polarizado debate sobre la reforma migratoria.


El Senado de Estados Unidos rechazó ayer iniciativas sobre seguridad fronteriza y para excluir a inmigrantes indocumentados recién llegados de un programa de trabajadores temporales propuesto por el presidente George W. Bush. Dos propuestas, presentadas por republicanos y demócratas, fueron rechazadas en votación.
Derechos humanos


El anuncio de George W. Bush, de enviar efectivos de la Guardia Nacional a la frontera con México no frenará la inmigración indocumentada y representa un riesgo para los derechos humanos, dijeron varios expertos. También señalaron que esa «militarización» podría exacerbar la violencia en la zona fronteriza, acechada por traficantes de personas, drogas y armas, secuestradores y otros criminales.

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