Amnistía Internacional ha acusado a Croacia de tratar con violencia a los inmigrantes y solicitantes de asilo en su frontera con Bosnia-Herzegovina, aunque el ministro del Interior de este país lo negó hoy.

En un informe titulado “Empujados hasta el límite: La violencia y el abuso contra refugiados e inmigrantes en la Ruta Balcánica”, AI afirma que, al tolerar tal comportamiento de la policía croata los gobiernos europeos participan en la violencia y la negación de sus derecho a miles de inmigrantes a solicitar asilo.

El director de investigación de la oficina de AI para Europa, Masssimo Moratti, advierte en el informe que los gobiernos europeos incluso financian a la policía croata con fondos destinados a fortalecer la seguridad de la frontera de la UE.

“Al mismo tiempo gente que huye de la guerra y la persecución son golpeados y robados por la policía croata y forzadas a un limbo legal, abandonados a la merced de un sistema de asilo que no funciona en Bosnia-Herzegovina”, asegura Moratti.

De esta forma, según se describe, sin que se respete el derecho internacional, los inmigrantes son empujados a campos en malas condiciones en Bosnia-Herzegovina cerca de la frontera croata.

AI considera que actualmente en antiguas fábricas de Bihac y Velika Kladusa se encuentran “atrapados” 5.500 inmigrantes que viven en condiciones insalubres, sin agua caliente, asistencia médica y suficientes alimentos".

Alrededor de un tercio de inmigrantes que fueron entrevistados en Bihac y Velika Kladusa denunciaron violencia por parte de la policía croata, informa AI.

En respuesta al informe de AI, el ministro del Interior croata, Davor Bozinovic, aseguró hoy que su departamento tiene “tolerancia cero” con posibles comportamiento ilegales de sus agentes.

“Una vez más queremos acentuar que en el trato de inmigrantes la policía respeta sus derechos básicos y dignidad y les posibilita acceso al sistema de protección internacional si la necesitan”, insiste el ministro.

Bozinovic asegura que su ministerio investigó denuncias anteriores de este tipo y que casi todas se han probado falsas.

Los inmigrantes “en la mayoría de los casos acusan falsamente a los agentes de policía de violencia, esperando que esas acusaciones les ayuden a entrar en Croacia y continuar su camino a los países de destino”, según Bozinovic.

El ministro negó de forma similar también otros informes acusatorios de organizaciones internacionales.

Human Rights Watch acusó en diciembre pasado a Croacia de forzar a los inmigrantes de vuelta a Bosnia, a veces de forma violenta, a veces robando y destruyendo sus posesiones, sin darles la posibilidad de pedir asilo.

El Ministerio del Interior croata informó ayer haber despedido a un policía croata que, según un vídeo publicado por internet, obligaba a los inmigrantes ilegales detenidos a gritar un saludo pro-nazi croata de la Segunda guerra.EFE