Los guipuzcoanos con ideología política de derechas y europeísta muestran actitudes de “mayor rechazo” e “indiferencia” hacia la población refugiada, a la que ven incluso con “más estereotipos negativos”, frente a los de posiciones de izquierdas, que sienten “culpa o vergüenza” del trato que les da Europa.

Ésta es una de las conclusiones del estudio “Población refugiada: reflejos y percepciones” que han llevado a cabo, y presentado este martes en San Sebastián, las investigadoras de SOS Racismo Gipuzkoa, adscritas al departamento de Psicología Social y Metodología de las Ciencias del Comportamiento de la UPV-EHU, Magdalena Bobowik y Maitane Arnoso.

Se trata de un estudio no representativo, financiado por la Diputación Foral y el Gobierno Vasco, que ha sido hecho a partir de encuestas a 408 adultos autóctonos entre octubre de 2018 y febrero de 2019, y se ha centrado en “el cruce de variables psicosociales”, entre ellas, la orientación política en la que se han definido los propios participantes dentro de una escala de izquierda a derecha.

Según los resultados del informe, aunque “las emociones de pena y tristeza” hacia la situación que viven los refugiados “emergen en todos los sectores de la sociedad”, las respuestas emocionales “varían” en función de la adscripción ideológica.

De esta manera, concluyen que los encuestados que se sitúan en una orientación a la izquierda del espectro político manifiestan mayores “emociones de respeto” hacia dicho colectivo y sentimientos de “culpa y vergüenza” ante el modo en que Europa ha reaccionado ante la crisis de los refugiados, mientras que “cuanto más a la derecha se ubica la población, más surge el orgullo ante la respuesta institucional”.

En el análisis de estereotipos, la investigación pone de relieve que en las posiciones de centro-derecha afloran más las ideas “ligadas a la poca moralidad”, “la distancia cultural” y “las exigencias de asimilación a los patrones de la sociedad receptora”, lo que “suele servir de base” a la hora de negar la igualdad de derechos, con la que, sin embargo, se muestran “más de acuerdo” las ideologías de centro-izquierda.

Respecto a las políticas de acogida y asistencia, los guipuzcoanos “con una orientación de derechas perciben un mayor apoyo institucional hacia los refugiados en comparación a las de izquierdas”, lo que también se refleja en sus “conductas prosociales” de apoyo, que son “manos habituales entre los participantes más conservadores”.

El informe ha detectado “representaciones o creencias” que vinculan a los demandantes de asilo y refugio con la religión musulmana y “cierta tendencia a criminalizarla”, además de “una invisibilización de la multiplicidad de factores que explican el desplazamiento forzado”, lo que supone “un paso” hacia la “deshumanización”, “la activación de respuestas de desprecio e indiferencia” y “un desacuerdo en torno a la igualdad de derechos”.

Para combatir este tipo de percepciones, SOS Racismo ha organizado una jornada de debate en torno a la acogida y convivencia con la población refugiada el próximo jueves en el Museo San Telmo de San Sebastián, al tiempo que ha puesto en marcha, en colaboración con CEAR, un Proyecto de Mentoría para favorecer “la empatía” e “integración” por el que familias o grupos de amigos autóctonos compartirán periódicamente tiempo de ocio con uno o varios refugiados durante un mínimo de seis meses.