«No tenemos la prueba, pero numerosos indicios nos hacen sospechar que reciben ayuda». El portavoz del Gobierno canario, Miguel Becerra, se refirió ayer así a la posible existencia de barcos nodriza que ayudarían a las embarcaciones menores durante el largo trayecto que recorren al transportar inmigrantes hasta Canarias. «El buen estado de salud en el que llegan tras siete días de navegación» y «el índice de ocupación de las embarcaciones, que no permite almacenar las cantidades de comida y carburante necesario» para la larga travesía, son algunas de las razones que esgrimió.

El pasado fin de semana llegó a Canarias casi un millar de inmigrantes irregulares a bordo de barcazas. Los últimos en ser detenidos fueron 18 inmigrantes que llegaron a bordo de un barco negrero, de bandera mauritana, que atracó en el Puerto de La Luz y de Las Palmas. El capitán del barco Mapo Peche II, Daniel Pereira, y sus 13 tripulantes, también fueron detenidos.

En el camarote del capitán, la Policía encontró la documentación de los inmigrantes. El pesquero, de unos 40 metros de eslora, ha atracado en otras ocasiones en el puerto canario, si bien en esta ocasión el capitán carecía de cuaderno de bitácora, por lo que se ignora la ruta que siguió.

Ayer llegaron otras dos embarcaciones a Tenerife, con 161 inmigrantes a bordo. En la primera, que atracó en el puerto de Los Cristianos, en el municipio de Arona, viajaban 82 sin papeles, mientras que la segunda, que también llegó a ese mismo puerto, estaba ocupada por 79 personas. Ambas barcazas fueron localizadas desde un avión del Servicio de Vigilancia Aérea de Salvamento Marítimo. Asimismo, a Gran Canaria arribó una patera procedente de Marruecos con una decena de inmigrantes indocumentados, si bien sólo uno pudo ser detenido. (También de nacionalidad marroquí son los 110 inmigrantes que ayer llegaron al parque natural de Cabo de Gata, en Almería, en dos pateras y que lograron llegar hasta la costa a través de los acantilados. La Guardia Civil logró interceptar a 25 de ellos, mientras buscaba al resto).

Las medidas anunciadas ayer por la vicepresidenta fueron acogidas con algo de escepticismo por parte del Gobierno canario. «Si las medidas se adoptan de inmediato, lo celebramos. Pero la apreciación que tenemos desde Canarias es que no se ha abordado con la suficiente intensidad, que la llegada de inmigrantes tiene que ser un problema de Estado y que se deben impulsar acuerdos con los países africanos», recalcó Becerra.

Para el Gobierno regional, las repatriaciones de los inmigrantes «se deben hacer lo antes posible, al igual que la puesta en marcha de patrullas mixtas España – Mauritania». En este sentido, uno de los grandes problemas que afronta estos días Canarias es la acogida de menores inmigrantes. «Tenemos a nuestro cargo a unos 300 chavales, de los que 30 llegaron el pasado fin de semana», señaló Becerra, que insistió en la necesidad de aplicar un cupo de acogida de menores en las islas.

El delegado del Gobierno en Canarias, José Segura, culpó de la llegada masiva de inmigrantes a los gobiernos de Mauritania, Senegal, Mali, Guinea Conakry y Nigeria «que no son capaces de desarrollar sus economías». Segura confirmó la llegada de 1.426 inmigrantes en este mes de mayo a Canarias, 1.100 de ellos desde el pasado viernes.

En el Centro de Internamiento de Fuerteventura había ingresados a día de ayer 1.040 inmigrantes; en el de Barranco Seco, en Gran Canaria, 145; y en Hoya Fría, de Tenerife, 117. En Tenerife hay 598 en la Comisaría de Playa de Las Américas y 131 en los juzgados del municipio de Arona. De ellos, 212 serán trasladados al campamento militar de Las Raíces, al norte de la isla.