El ministro del Interior italiano, el ultraderechista Matteo Salvini, entregó hoy el alegato con el que pretende disuadir al Senado de levantar su inmunidad y permitir que se le juzgue por el bloqueo de un centenar de inmigrantes en una nave militar en agosto.

Además el líder ultraderechista remitió dos documentos firmados respectivamente por el primer ministro Giuseppe Conte y por el otro vicepresidente y líder del antisistema Movimiento Cinco Estrellas (M5S), Luigi Di Maio y el ministro de Infraestructuras, Danielo Toninelli.

El pasado miércoles la Junta para las Elecciones y la Inmunidad del Senado empezó a debatir si permitía el juicio a Salvini, que es investigado por secuestro de personas tras bloquear durante 5 días el desembarco en Sicilia (sur) de los inmigrantes salvados por la nave militar Diciotti.

Fuentes próximas al ministro indicaron que ya ha presentado su alegato defensivo, junto a los documentos firmados por sus socios de Gobierno, y que se trata de un texto “técnico”, no “político” y sin ataques a los jueces.

El documento, que será divulgado una vez que lo lea el Senado, repasa los momentos más importantes de aquellos hechos, fruto de la política de puertos cerrados que Salvini ha impuesto sobre todo a las ONG para cortar el flujo migratorio en el Mediterráneo central.

El ministro en un primer momento aseguró que no le importaba la posibilidad de que se le procesara por el bloqueo de inmigrantes pero después llamó a impedir que se le abriera juicio.

Su objetivo ahora es demostrar que actuó “exclusivamente con fines de interés público”, pues la legislación que regula los procesos contra presidentes y ministros dicta que debe negarse su enjuiciamiento cuando hayan protegido un interés del Estado.

Por eso, en su informe, Salvini asegura que su “deber” es proteger el orden y la seguridad pública que, sostiene, “se verían en riesgo por un indiscriminado acceso en el territorio del Estado”.

La junta del Senado tiene un máximo de sesenta días para decidir y deberá hacerlo con una votación en la que la postura de los socio de Gobierno de Salvini, el Cinco Estrellas, será esencial.

Así, este partido tradicionalmente contrario a la inmunidad se encuentra con el dilema de si votar a favor de quitar la protección a su aliado en el Gobierno, como ya han abogado distinguidos dirigentes, o protegerle e ir en contra su propio discurso.

Por eso Di Maio, que en un primer momento defendió el juicio a Salvini, ha pasado a reivindicar que su política migratoria es compartida por todo el Ejecutivo.