(Puntualiza en el segundo y octavo párrafo las declaraciones de Balaguer, para hacer más precisas sus manifestaciones)

El Casal dels Infants ha reclamado más espacios para atender a jóvenes desfavorecidos y ha advertido que la inserción laboral de los jóvenes en riesgo social es más complicada ahora que antes de la crisis, según ha explicado la directora general de la entidad, Rosa Balaguer, en el balance anual del casal.

“Hemos ido reduciendo el acompañamiento a jóvenes sin familia ha explicado Balaguer porque los itinerarios de acompañamiento de estos jóvenes son más largos. Un itinerario de un joven duraba ocho meses, hoy cuando entra un chico en un piso sabemos que no estará menos de un año y medio porque primero tiene que formarse para acceder al mundo laboral”.

Rosa Balaguer ha reclamado más espacios para atender a los jóvenes para que hagan una transición segura hacia la edad adulta, ya que los servicios disponibles actualmente no son suficientes ante el aumento de jóvenes inmigrantes que han llegado a España este año, según la directora general.

La entidad considera este sector especialmente vulnerable y, por ello, el objetivo es “formar e insertar” en el mundo laboral a los jóvenes mediante diversos programas que van desde la participación social en el ‘Casal Jove’ a programas como el Servicio de Transición a la Autonomía, con el que la entidad ha atendido a 50 jóvenes.

“Tenemos una situación de pobreza cronificada, no vemos cómo saldremos de esta situación que afecta a los colectivos más vulnerables: niños, jóvenes y inmigrantes”, ha destacado Balaguer, que también ha añadido que los indicadores de exclusión social y desigualdad no han recuperado los valores previos a la crisis.

Los sectores con mayor riesgo de pobreza o exclusión son las personas migradas en un 47,7 %, los hogares monoparentales en un 35,5 %, las familias a cargo con hijos en un 24,9 % y los niños en un 28,5 %, según datos facilitados por el Casal dels Infants.

La entidad tiene una lista de espera estable de 58 familias en los Centros Abiertos, lo que supone que tengan que valorar qué familias están en peor situación y no puedan dar toda la atención que querrían.

Rosa Balaguer ha matizado que han atendido a 2.583 niños de 0 a 16 años, aunque se sienten “presionados por la demanda para acompañar a más personas”, y admite que podrían “reducir el número para atender durante más tiempo a los menores”, ya que “tener más niños no significa hacerlo mejor”.

Las condiciones precarias de vivienda y la inestabilidad laboral con trabajos temporales o precarios son los principales factores que afectan a las familias más vulnerables que atiende la organización y, en especial, a los niños de estas familias.

Balaguer también ha indicado que es necesario combatir la exclusión educativa, ya que esta vulnerabilidad de las familias se suma al riesgo de exclusión educativa de sus hijos y hijas.