El concejal del PSOE José Zapata pide al alcalde el cese del pedáneo de El Esparragal. Ángel Pérez Martínez, por sus declaraciones xenófobas y racistas. Según el edil, el alcalde pedáneo «no puede seguir ni un minuto más en el cargo» al declarar públicamente que «debemos dar las gracias al proyecto – refiriéndose a la construcción de un colegio privado en suelo público – porque así nuestros hijos no se juntarán con moros e inmigrantes, pues éstos no podrán pagar las cuotas que quieren cobrar para asistir a dicho colegio».

El pedáneo, Ángel Pérez Martínez, niega haber pronunciado dichas palabras y aseguró ayer a La Verdad que «el colegio no es privado, sino concertado, por lo que puede ir todo el mundo». En cuanto a la referencia a «nuestros hijos» manifestó que «no he podido decir eso porque mi hijo ya va al instituto y mi hija está acabando en la Universidad».

La intervención del pedáneo, según informa el concejal del PSOE, tuvo lugar durante la celebración de la asamblea general de la entidad urbanística de conservación del plan parcial de El Campillo, a la que asistió c como invitado en su calidad de alcalde pedáneo y en donde, ostentando esta condición, se expresó públicamente «en tan desafortunados términos».

«Un malentendido»

El pedáneo asegura que «debe ser un malentendido o lo entenderían mal. Además, el señor Zapata no estuvo en la reunión». Por su parte, el concejal del PSOE esgrime dos pruebas sobre las supuestas declaraciones xenofobas. Una de ellas es un escrito de un socio de la entidad que pide al gerente de la misma que «no se recoja en el acta las desafortunadas palabras del alcalde pedáneo, pues me parecen racistas y xenofobas e impropias de un cargo público, cuando vino a decir que éramos afortunados ya que no tendríamos moros e inmigrantes». La otra prueba es una carta al director de una vecina de El Esparragal publicada en La Verdad el pasado 2 de mayo.