Sevilla – Dos personas han sido detenidas y otras cinco están
identificadas, aunque aún arrestadas, por la reyerta que se produjo el
pasado sábado en la romería de la localidad sevillana de El Saucejo y que
derivó posteriormente en un conflicto entre payos y gitanos.
   La
Guardia Civil mantiene abiertas las investigaciones para aclarar estos
hechos, según informó una portavoz de la Subdelegación del Gobierno en
Sevilla, que detalló que la primera detención se practicó en la madrugada
del domingo al lunes y que el arrestado ha pasado ya a disposición
judicial.
   El segundo arresto se produjo ayer y el detenido, cuya
identidad no ha trascendido, permanece en dependencias policiales. Además,
el Instituto Armado tiene un dispositivo de vigilancia en El Saucejo,
localidad de 4.300 habitantes ubicada en la Sierra Sur, después de los
incidentes que el pasado fin de semana han enfrentado a parte de la
comunidad paya con algunos de sus vecinos gitanos a raíz de una reyerta
sucedida en una romería.
   
Conflicto
racial. Unos hechos por los que el Defensor del Pueblo Andaluz, José
Chamizo, mostró su preocupación y ha iniciado una actuación de oficio
solictando información al alcalde de la localidad, Antonio Díaz Herrero
(PSOE). La preocupación de Chamizo reside en que estos acontecimientos
escondan una situación de fondo más problemática, de índole racial,
extremo que rechazó el Ayuntamiento de la localidad que consideró que han
tenido «más repercusión de lo que han sido en sí».
   La concejal de Asuntos Sociales, María José Camero, explicó que la
Corporación municipal está trabajando y manteniendo reuniones constantes,
la última del equipo de gobierno al completo, que ayer por la tarde se
desplazó a la sede del PSOE de Sevilla para analizar la situación. La edil
defendió que «estamos luchando para darle la mejor solución posible» a
este problema, en el que descartó el componente racial aunque sí admitió
que existen «problemas puntuales, igual que en todos los pueblos», entre
los payos y los gitanos del municipio, cuyo número no supo precisar.
   Durante las fiestas de San José Obrero, celebradas el sábado, un grupo de
jóvenes de etnia gitana se enfrentó a otro de payos, tres de los cuales
tuvieron que ser tratados en un hospital de sus lesiones, aunque todos han
recibido ya el alta. A raíz de este conflicto, la romería se interrumpió y
un numeroso grupo de personas se dirigió a la zona del pueblo conocida
como Majadahonda, donde vive el grueso de la comunidad calé. La actuación
de la Guardia Civil impidió que los manifestantes prendieran fuego a las
viviendas de protección oficial que allí se construyen, como era su
intención, aunque sí causaron destrozos. Los agentes que intervinieron
pertenecen al puesto de Los Corrales, por lo que el PP ha solicitado en el
Congreso la instalación de una casa cuartel de la Guardia Civil.