Madrid, 14 nov (EFE).- El Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad de Madrid y la Fundación CERMI Mujeres han exigido hoy al Gobierno regional que active de forma inmediata los apoyos y recursos necesarios para que una mujer siria con discapacidad pueda recuperar la tutela de sus hijos y pueda ejercer su derecho a ser madre, como lo había hecho hasta el momento en el que la familia fue separada.

Ambas organizaciones han defendido los derechos de Fátima Wadi ante las Direcciones Generales de Mujer y de Atención a Personas con Discapacidad de la Comunidad de Madrid.

Fátima Wadi, una mujer con discapacidad física, de 36 años, procedente de Alepo, Siria, que llegó a España huyendo de la guerra con sus tres hijos pequeños de 1, 5 y 9 años, precisan en un comunicado el CERMI de la Comunidad de Madrid y la Fundación CERMI Mujeres.

Cuando llegó a Madrid, los acogieron en un centro para personas refugiadas de Alcobendas. A su marido le condenaron a nueve meses de prisión por violencia de género, pena que luego le conmutaron por una orden de alejamiento. Ella estaba entonces embarazada y con tres menores a su cargo.

Tras la condena de su marido por malos tratos, en diciembre de 2017, y de la muerte de su madre, decidieron irse a Alemania, buscando la ayuda de un familiar. En abril de este año, las autoridades alemanas los devolvieron a España basándose en el Convenio de Dublín, y llegaron sin acceso a ayudas.

En mayo de 2018, la Comunidad de Madrid decidió que Fátima Wadi no podía cuidar bien de sus hijos, justificando la decisión por su situación de discapacidad.

La Administración regional asumió la tutela de los pequeños y se llevó a los tres menores a un centro, mientras que la madre fue trasladada a una residencia para personas con discapacidad física, donde aún hoy reside.

El pasado viernes, dio a luz a su bebé en el Hospital Gregorio Marañón. Ella ya ha recibido el alta, mientras que su niña está la incubadora y recibirá el alta en las próximas horas. Hoy se ha presentado una medida cautelar para la no retirada de la tutela de la recién nacida.

El CERMI de la Comunidad de Madrid y la Fundación CERMI Mujeres disponen de informes favorables en los que se señala que Fátima Wadi, con los apoyos necesarios, puede desempeñar perfectamente sus funciones como madre, lo que podría realizarse en un centro de protección para mujeres, por ejemplo, donde pudiera quedarse con su hija recién nacida, para después hacer el reingreso de los otros tres hijos.

Las dos organizaciones destacan que la situación en la que se encuentra esta mujer actualmente supone un claro incumplimiento de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, en la que se reconoce “la importancia que para las personas con discapacidad reviste su autonomía e independencia individual, incluida la libertad de tomar sus propias decisiones”, al igual que se habla de garantizar los derechos humanos y las libertades fundamentales de las personas con discapacidad sin discriminación. Uno de estos derechos es el que tiene cualquier mujer para ser madre, señalan.