El presidente del Foro Tunecino para los Derechos Económicos y Sociales (FTDES), Messaoud Romdhani, dirigió hoy una carta abierta al ministro del Interior italiano, el ultra – derechista Matteo Salvini, en la víspera de su visita oficial en el país, al que acusa de exagerar sobre la situación migratoria.

“Su llegada al poder y sus intervenciones mediáticas preocupan en Europa y en los países del sur del Mediterráneo a los que usted denigra. Su postura extrema en la que denuncia una invasión refleja una triple paradoja”, lanzó el representante de la ONG tunecina.

En primer lugar, Romdhani criticó el calificativo de “invasión” y explicó la caída de un 80% de las llegadas de migrantes a las costas italianas desde 2017 basándose en las cifras de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM).

Según este organismo dependiente de la ONU, cerca de 21.000 migrantes llegaron a Italia durante los nueve primeros meses del año frente a los 119.000 durante el mismo periodo de 2017.

“Usted pretende que la Unión Europea haga frente a una invasión cuando ésta acoge muchos menos refugiados e inmigrantes que otros países en el mundo, principalmente en el sur”, insistió.

Romdhani recordó además la historia de los migrantes italianos que abandonaron el país durante el siglo XX, de los cuales cerca de 4,5 millones llegaron a Estados Unidos “en situación irregular, sin visa de trabajo y víctimas de discriminación”.

Asimismo acusó al ministro de centrarse únicamente en la migración que proviene de África y Oriente Medio hacia el continente europeo y evocó los 8.600 ciudadanos italianos que residen actualmente en Túnez.

Por otro lado, el portavoz criticó el llamado “decreto Salvini”, aprobado el pasado 24 de septiembre por el gobierno italiano, al considerar que éste limita el acceso a la protección legal de aquellas personas que viven en situación irregular.

El portavoz de FTDES subrayó además que el país europeo necesita mano de obra en cierto sectores y que éste podría beneficiarse de un acuerdo bilateral para regular la situación de los trabajadores temporales, lo que impedirá la explotación laboral por parte de las redes de trata y limitará la salida de embarcaciones ilegales desde Túnez y, en consecuencia, las pérdidas humanas.

Por último, la ONG denunció la “criminalización” del rescate en el mar, cuyos efectos son “desastrosos e incluso criminales”, refiriéndose así al reciente arresto y liberación de seis pescadores tunecinos tras auxiliar un barco con migrantes y ser acusados de tráfico de personas.