El presidente de la Asociación de Inmigrantes Sudamericanos Intiraymi de Lorca, Luis Ochoa, denunció ayer que muchos extranjeros residentes en el municipio son «explotados laboralmente y discriminados desde el punto de vista salarial». Luis Ochoa aseguró, en coincidencia con la celebración del Día del Trabajo, que en el municipio «todavía hay miles de inmigrantes sin papeles, que son enormemente explotados» y también explicó que la mayor parte de los casos se concentran en los sectores de la agricultura y la construcción. Según el presidente de Intiraymi, de nacionalidad ecuatoriana, muchos latinoamericanos «se ven obligados a trabajar diez o doce horas al día, y a veces los patronos solo les pagan ocho».

El dirigente ecuatoriano resaltó que los salarios para todos los indocumentados no superan los cuatro euros por hora en sus trabajos en el campo, a los que tienen que deducir los costes del transporte en autobuses que les exigen sus empleadores.Ochoa opinó que «las autoridades tienen que ayudarnos».