Las instituciones vascas y Cruz Roja Euskadi han atendido a un total de 1.984 personas migrantes en tránsito hacia otros países de Europa desde el pasado mes de junio. Uno de los picos de mayor asistencia ha sido este pasado fin de semana, en el que se trató a 471 personas.

El Departamento de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno vasco hicieron públicos ayer esos datos en una nota de prensa en la que añade que la mesa interinstitucional formada por el Ejecutivo autonómico, las tres diputaciones forales, los ayuntamientos de Bilbao, San Sebastián, Vitoria e Irún, Cruz Roja y otras entidades sociales sigue trabajando para atender este flujo de personas que huyen de conflictos y de la extrema pobreza.

El grupo de trabajo se reúne semanalmente para adaptar los recursos de urgencia a una situación en continuo cambio.

La tarea de acogida de estas personas en tránsito hacia otros países de Europa que proceden de la llegada masiva a las costas españolas es asumida por Cruz Roja en virtud de un acuerdo de colaboración con las instituciones vascas.

A los migrantes se les ofrece asesoramiento, alojamiento temporal, comida y bebida, así como asistencia sanitaria, inicialmente por Cruz Roja y derivación posterior a urgencias si fuera necesario.

En este sentido, el alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, reconoció ayer que puede darse «un problema» en ciudades como la suya si aumenta de forma considerable el número de personas a las que deben atender. En la capital donostiarra tienen recursos para atender hasta 40 migrantes. «Si se pasa a otras cifras, podríamos tener problemas», advirtió el regidor, del PNV.