Los centros educativos de la Región, tanto públicos como concertados – que son los que se sostienen con fondos públicos – tienen que reservar cada curso un número determinado de plazas para niños extranjeros. Algo que depende de cada colegio o instituto y también de las zonas y poblaciones.

Según fuentes de la Consejería de Educación, una de las variables con las que cuentan para poder saber cuántos extranjeros solicitarán plaza en los centros educativos es la tasa de entrada de inmigrantes. A este respecto, las mismas fuentes señalaron que «aunque esta tasa aún es alta, cuando pasan varios años a esos niños ya no se les considera como extranjeros».

De hecho en el sistema educativo regional, excluyendo los centros privados, ya hay más de 25.000 alumnos no nacidos en la Región, de los que más de un 50% son ya españoles».

Según la Administración, se suelen hacer algunas excepciones en los casos de escolarizaciones especiales, que también pueden afectar a extranjeros, ya que «no por no sobrepasar la ratio – niños por clase – se va a enviar a los alumnos a otro centro».