Detenido el presunto homicida del joven ucraniano apuñalado en San Sebastián
El arrestado, de la misma nacionalidad, era conocido por «su carácter violento y por tener problemas con mucha gente». La víctima vivía en Azkoitia e iba a regresar en julio a su país.
Diario Vasco, 19-04-2006SAN SEBASTIÁN. DV. Apenas siete horas después de la trágica agresión que el lunes por la tarde segó la vida de un joven de 23 años de nacionalidad ucraniana en una calle del barrio de Amara de San Sebastián, agentes de la Ertzaintza detuvieron en otra zona de la ciudad al presunto autor de los hechos. Se trata de un compatriota de la víctima de 32 años de edad, que en el momento de su detención portaba una navaja, con la que presuntamente cometió el crimen.
Según informó el departamento vasco de Interior, el presunto agresor, que responde a las iniciales V.L., fue localizado a las 23.30 horas de la noche del lunes en la calle Calzada de Egia, en el barrio del mismo nombre. Tras realizarle el registro correspondiente, los agentes se incautaron del arma blanca con la que al parecer hirió de muerte a la víctima, sin una razón aparente en el transcurso de una discusión banal en un bar.
Los hechos, según relató ayer a DV un conocido de ambos, tuvieron lugar pocos minutos después de las cuatro de la tarde del lunes. Nasar Dzigita, nombre de la víctima, estaba con una amiga en un bar de Felipe IV. «Yo no estaba presente pero parece que estaban discutiendo, no peleando, sobre un tema sin importancia y el otro sacó un cuchillo y le dio», cuenta Eynur Karimzade, un joven azerbayano que junto a otros inmigrantes de países del Este de Europa se está ocupando de la repatriación del cadáver del joven a su localidad natal, Ivano Frankovsk, en el suroeste de Ucrania.
Ellos, sus amigos, es la única familia que el joven tenía en Gipuzkoa, ya que su padre – «madre no tiene», explica Eynur – y su hermano viven en Ucrania. «Él llegó hace un año después de estar trabajando en Italia», cuenta. «Aquí vivía en Azkoitia y trabajaba en Azpeitia», añade sin querer detallar exactamente en qué lugar ya que Nasar no tenía los papeles en regla. «Pero tenía los billetes para volver en julio a Ucrania», lamenta. Ayer tuvieron que devolverlos.
Eynur y el resto de amigos y conocidos del joven asesinado reconocen que se encuentran un poco «perdidos» por todo lo que ha pasado, ya que «es la primera vez que ocurre una barbaridad así». Para él, el ataque perpetrado presuntamente por V.L. que ha costado la vida del joven es fruto del carácter agresivo del detenido, a quien Eynor conoce desde hace tiempo.
«Es muy violento»
«Nacar ha caído el primero, le ha tocado a él como le podía haber tocado a otro», afirma contundente mientras explica que el presunto autor de las dos puñaladas, en el pecho y en el abdomen, que acabaron con la vida de su amigo es una persona conocida entre la comunidad de inmigrantes de Europa del Este porque tiene «un carácter muy muy violento».
«Andaba solo o con chavales menores que él», explica Eynor, «y tenía problemas con muchas personas de la sociedad rusa». Según apunta, cualquiera de ellos podría haber sido víctima del ataque porque no existía ninguna afrenta especial entre el fallecido y su presunto homicida.
El trágico suceso es calificado también como «puntual» por el responsable de Seguridad Ciudadana en San Sebastián, Ernesto Gasco, quien apuntó ayer que al parecer no se trata de un suceso vinculado a la delincuencia común sino de un hecho aislado, «que esperemos no vuelva a repetirse».
También algunos comerciantes de la calle Eustasio Amilibia, en cuyo número 7 ocurrió la agresión, revalidaban esta teoría. Según aseguraron, «aunque se ven algunas cosas», no recuerdan nada tan grave.
Desde un comercio próxima a una tienda de alimentación rusa muy frecuentada por personas extranjeras, aseguraban ayer que «a veces suelen quedarse aquí fuera hablando y son todos muy educados. Vienen aquí desde toda la ciudad a comprar productos originarios de allí, incluso Karpin venía antes», asegura señalando a la tienda Kashtah, que ayer cerraba por descanso semanal, pero que estos días es punto de encuentro de todos ellos.
(Puede haber caducado)