El secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, defenderá el próximo Primero de mayo la «guerra a la pobreza» y la movilización social con instrumento «imprescindible» ante las políticas que aumentan la desigualdad. En una rueda de prensa y encuentro previo con los medios de comunicación en Bilbao, el dirigente sindical ha presentado los actos previstos por el sindicato con motivo del Día del Trabajador, que incluirán dos actos confederales, uno en Bilbao y otro en Pamplona.

El sindicato ELA ha elegido para este año el lema «Guerra a la pobreza. Aquí no sobra nadie», una jornada que la central sindical considera una «oportunidad» para dar continuidad y reforzar la huelga feminista del 8 de marzo y las movilizaciones que están desarrollando los pensionista. «Es imprescindible aunar las distintas luchas contra el sistema capitalista, heteropatriarcal y racista», ha manifestado.
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Este Primero de Mayo, según ha destacado el líder de ELA, Adolfo Muñóz, servirá también para mostrar la preocupación del sindicato por la xenofobia, el racismo y la «pujanza» de la extrema derecha en Europa que suponen un «cóctel perverso».

ELA ha denunciado la división de la clase trabajadora que se está produciendo entre trabajadores fijos y temporales, migrantes y autóctonos, personas que cobran prestaciones sociales y las que no, o las que «tienen papeles no». Ha criticado también que se estén utilizando las prestaciones sociales como arma« y que se trate de »criminalizar« a las personas que cobran dichas prestaciones par »generar una guerra entre pobres«.

Asimismo, Muñoz ha denunciado que, pese a que se está produciendo crecimiento económica, «no cambian las políticas acordadas», según ha apuntado, por PNV, PSOE, PP y «si es posible Ciudadanos».

Muñoz ha criticado el «componente ferozmente antisindical» del Gobierno Vasco contra el «sindicalismo reivindicativo» y, en este sentido, ha asegurado que «no hay sociedad democrática sin contrapoder y sin sindicalismo fuerte» Ha asegurado que «hay gente del Gobierno Vasco que trabaja para la patronal» y ha indicado que el Ejecutivo autónomo debería defender la autonomía sindical y, en cambio, solo busca relaciones con los sindicatos «clientelares».

El dirigente sindical ha señalado que la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, es una «persona muy próxima a Adegi» que «trabaja muy bien para defender los intereses de la patronal». Ha afirmado que les gustaría tener una relación «normalizada» con el PNV y el Gobierno vasco pero cree que, para ello, el Ejecutivo autónomo debería «aceptar las reglas de juego democrático». Asimismo, ha vuelto a reiterar que han pedido reuniones al lehendakari y a los responsables de Seguridad, Trabajo, Hacienda y Desarrollo Económico, sin que hayan obtenido respuesta.

Por otra parte, sobre las relaciones entre ELA y LAB, ha apuntado que «no están bien» y le gustaría que «se resolviera» lo que les «impide ir juntos».