El ministro del Interior de Alemania, Thomas de Maizière, expresó hoy en Sofía, antes del inicio de un consejo informal de Interior y Justicia de la UE, su esperanza de que se pueda llegar en los próximos meses a un acuerdo sobre una gestión comunitaria en materia migratoria.

“Ahora las cifras no son como en 2015 y 2016 por lo que un acuerdo debería ser más fácil que entonces”, señaló el ministro alemán en referencia a la bajada notable de llegadas de refugiados el año pasado comparado con los dos años anteriores.

“Los ministros del Interior van a analiza los próximos pasos para un sistema europeo conjunto de asilo. El encargo de los jefes de gobierno está claro, encontrar una solución política hasta junio”, explicó De Maizière ante la prensa.

“Será difícil. La cuestión de un reparto justo (de solicitantes de asilo) es lo más complicado”, reconoció el ministro alemán.

“Para Alemania hay otros temas de interés, como condiciones y procedimientos iguales de acogida (de refugiados), para que un reparto justo pueda funcionar”, agregó De Maizière.

“Si las negociaciones son difíciles habrá que reconocerlo pero no enseguida rendirse”, concluyó el ministro alemán.

Los ministros del Interior de la Unió Europea (UE) debaten hoy como avanzar en la creación de un sistema comunitario de asilo para evitar los problemas sufridos durante la llegada masiva de refugiados en 2015 y 2016, cuando más de un millón de inmigrantes fueron acogidos por países como Alemania, Austria y Suecia.

Mientras que la Comisión Europea y Alemania proponen un sistema de reparto de refugiados para períodos con muchas llegadas de refugiados, los países excomunistas del Este de Europa, con Hungría y Polonia a la cabeza, se oponen a esa idea y quieren centrar sus esfuerzos en la protección de las fronteras exteriores.

También el nuevo Gobierno austríaco, formado el pasado mes de diciembre por conservadores y ultranacionalistas, se ha mostrado escéptico frente con un sistema de cuotas obligatorias de reparto.

Alemania, Suecia y Austria han acogido en los últimos tres años la gran mayoría de refugiados que llegaron en Europa desde zona de conflicto en Oriente Medio y África.