La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) anunciaron hoy que ofrecerán asistencia económica extra a 129.000 refugiados considerados vulnerables de cara al comienzo del invierno en Egipto.

Los beneficiarios han sido identificados por las agencias de la ONU como especialmente necesitados, el 12 % de ellos es menor de 18 años y se incluyen ciudadanos sirios, iraquíes, yemeníes, somalís, eritreos, sudaneses y etíopes, según un comunicado.

Los refugiados recibirán a finales de noviembre una ayuda económica de al menos 620 libras egipcias (unos 35 dólares) para que puedan hacer frente a las necesidades de la época invernal.

La suma será distribuida a través de las oficinas de correos y cajeros automáticos, en un primer momento en la provincia de la capital, El Cairo; en la de Alejandría, la segunda ciudad del país, y en la de Damieta (norte de Egipto).

Habrá también una campaña de concienciación para ofrecer consejos prácticos sobre lo que pueden hacer los refugiados para protegerse del frío ante la llegada del invierno, que en Egipto puede conllevar temperaturas mínimas de unos 5 grados centígrados en diciembre y enero.

“La ayuda de invierno garantiza que los refugiados vulnerables puedan cubrir sus necesidades básicas, como el acceso a ropa de abrigo y mantas, lo cual puede tener un impacto positivo sobre su bienestar”, aseguró el representante de ACNUR en Egipto, Karim Atassi.

El representante de UNICEF en el país, Bruno Maes, indicó que su organismo y ACNUR buscan ayudar a los menores y a las mujeres a “calentarse y protegerse” durante el invierno, ya que los niños son los más expuestos a problemas de salud en estos meses.