El intento de acampada de un grupo de migrantes afganos en una plaza de Mitilene, capital de la isla griega de Lesbos, para ser trasladados a territorio continental heleno, provocó hoy tensiones con los comerciantes locales, que llamaron a la policía para que interviniera, según la prensa local.

Los tenderos de la plaza Safo, que en este caso se vieron apoyados por un grupo de opositores a la presencia de los refugiados en la isla, así como varios miembros de la extrema derecha, ya hicieron el martes que estos afganos abandonaran la plaza tras 20 días de acampada.

Algunos medios locales aseguran que esta tensión, que no llegó a mayores gracia a la intervención de la policía antidisturbios y el alcalde de la isla, Spyros Galinós, fue orquestrada por un grupo de extrema derecha que desde hace días recorre la isla lanzando soflamas contra los refugiados.

La guardia costera griega informó hoy de que 113 refugiados fueron rescatados esta mañana en dos operaciones realizadas en aguas cercanas a Lesbos, personas que se suman a los casi 8.500 migrantes que permanecen en condiciones precarias y de hacinamiento en los campos de la isla, que tienen capacidad para apenas 3.200.

Estas condiciones precarias en los campos de las islas generan regularmente tensiones tanto dentro de los centros como en la propia sociedad local.

El lunes la isla de Lesbos llevó a cabo una huelga general convocada por el alcalde, Spyros Galinós, para pedir que se traslade a los refugiados a otras instalaciones del continente.

Varios grupos de refugiados habían protagonizado durante la noche del domingo al lunes varios enfrentamientos en el campo de refugiados de Moria que tuvieron como resultado numerosos daños en las instalaciones de ACNUR y en los dormitorios y para controlarlos fue necesaria la intervención de la policía.

Human Rights Watch (HRW) aseguró hoy en un comunicado que veinte organizaciones humanitarias griegas e internacionales remitieron una carta abierta al Gobierno griego en la que insisten en la necesidad de trasladar a más refugiados a territorio continental ante la llegada del invierno.