Los centros de internamiento de inmigrantes en Canarias continúan al límite de su capacidad, mientras ayer eran trasladados 60 subsaharianos a Mauritania desde la isla de Fuerteventura, y un nuevo cayuco con 52 ocupantes llegaba a Gran Canaria.

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Según datos de la Delegación del Gobierno en Canarias, 2.392 inmigrantes permanecen todavía en las islas, dieciséis más de las plazas con que cuentan todos los centros del archipiélago, que se elevan a 2.376, incluidos los centros militares habilitados al efecto.

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Aunque este nuevo traslado ha contribuido al alivio de los centros de detención, un nuevo cayuco llegó en la noche del lunes a Gran Canaria con 52 inmigrantes subsaharianos, de los que siete presentaban deshidratación e hipotermia y tuvieron que ser llevados a un centro de salud, donde los médicos aconsejaron trasladar a uno de ellos al Hospital Insular, según informó ayer la Guardia Civil.