Reino Unido deniega la residencia a dos hijos de una española nacidos en Londres

La Vanguardia, Redacción, 13-04-2017

Una española y un holandés que viven en el Reino Unido desde hace muchos años cuentan al The Guardian su estado de “devastación” después de que el Ministerio del Interior rechazara su solicitud de residencia permanente para que sus dos hijos nacidos en Londres fueran reconocidos como residentes permanentes del país.

Jan – Dinant Schreuder y Mónica Obiols, ambos de 49 años, están pasando por una “pesadilla burocrática”. Las autoridades británicas reclaman a los padres más pruebas que acrediten que los dos menores viven permanentemente con ellos. “¿Qué evidencia se supone que debo presentar? No pagan impuestos ni pruebas de donde viven. Son niños”, declara la madre española.

La mujer española, Mónica Obiols, profesora de necesidades especiales, vive en el Reino Unido desde 1988, mientras que su marido, también profesor, vive en el país desde que tenía tres años. Sus hijos tienen nacionalidad española. Según la legislación de la Unión Europea (UE), no era necesario nada más para permanecer en el Reino Unido después de haber nacido allí.

Sin embargo, la familia entró en “pánico” después del Brexit. Pidieron el permiso de residencia permanente para los cuatro. A los padres se lo concedieron, pero con los hijos fue diferente. El Ministerio del Interior sustenta la denegación de residencia permanente a los menores porque “no queda demostrado que hayan vivido por un período continuo de cinco años en el Reino Unido”.

La madre no entiende la denegación. “De los cuatro miembros de nuestra familia, posiblemente eran los más merecedores” dice Obiols en referencia a que sus hijos si nacieron en el Reino Unido y ella y su marido no. “No podemos ni queremos salir del país. No queremos interrumpir la educación de los niños”, sentencia la madre en un tono abatido.

Schreuder tampoco entiende cómo el Ministerio del Interior puede dar el permiso de residencia permanente a unos padres y denegárselo a sus hijos. La familia recurrirá la decisión y están “aturdidos” al comprobar que el Brexit tiene una afectación directa sobre su estabilidad familiar. Obiols afirma con rabia: “si me hubieran dicho antes del referéndum que ahora mismo estaría preocupándome por mi futuro, preocupada porque mis hijos puedan ir o no a la universidad, no lo hubiera creído”.

La sorpresa y desesperación de esta familia no es un caso aislado. Desde que se produjo el Brexit, el derrotero de la burocracia británica es un tema que preocupa a muchas familias extranjeras del país, incluso aquellas que tienen hijos nacidos en el Reino Unido.

Algunos deciden continuar adelante con las trabas burocráticas que deben superar para seguir en el país, aunque otros deciden abandonarlo. Es el caso de un científico francés que después de trabajar 20 años en el Reino Unido decidió marcharse porque no se le concedió el permiso de residencia permanente.

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