ABC

VALENCIA. El número de renuncias de bebés se incrementó en los tres primeros meses de 2006 por lo que la cifra total de niños recién nacidos adoptados por familias valencianas tras la renuncia de la madre se eleva a 164 desde el año 1998, según informaron fuentes de la Generalitat Valenciana.

La inmigración en una Comunidad que registra los índices más elevados, y las dificultades económicas con las que se encuentran las mujeres para iniciar una nueva vida en un país extranjero son las causas que justifican este aumento.

Un total de 10 recién nacidos serán adoptados próximamente por familias valencianas después de plantear las madres su deseo de iniciar los trámites de adopción tras el alumbramiento entre enero y marzo de este año, indicaron las mismas fuentes.

El incremento de las renuncias de niños recién nacidos que se ha producido en los últimos cinco años, según apuntaron las mismas fuentes, «puede atribuirse en su mayor parte a que la mayoría son mujeres inmigrantes con una situación social extraordinaria».

La evolución de los niños y niñas recién nacidos adoptados por estas circunstancias refleja que en 1998 fueron 18, cifra que se dobló en el pasado año 2005 a 28 recién nacidos y que este año, en menos de tres meses ya es de 10 bebés. La consellera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, destacó que en estos casos la Conselleria «inmediatamente asigna una familia para que esos niños puedan disfrutar de un ambiente familiar desde el principio».

A este respecto, la titular de Bienestar Social destacó la evolución social en torno a la adopción, que la ha convertido «en un hecho que no se oculta, y se ha normalizado socialmente».

Antiguamente, añadió, «los casos habituales de renuncia de los hijos tras la maternidad eran por una casuística diferente a la actual, normalmente por embarazos prematuros de mujeres solas, por incapacidad de afrontar económicamente la maternidad o por rechazo social».

Por último, De Miguel señaló que, a su juicio, «estos motivos han quedado obsoletos» y actualmente, las razones suelen ser «situaciones extremas como las que se asocian a las difíciles condiciones de viven algunas personas inmigrantes, entre otras», concluyó.