INMIGRACIÓN

Salut hará que niños inmigrantes consuman la dieta mediterránea

El Periodico, 25-03-2006

La Generalitat quiere que los pediatras de la sanidad pública inciten a las familias inmigrantes a introducir alimentos de la dieta mediterránea en la alimentación de sus hijos. Ésta es una de las medidas contenidas en el protocolo de atención a niños inmigrantes elaborado por la Conselleria de Salut, cuyo objetivo es mejorar la atención médica a esos menores, en los que se han detectado deficiencias alimentarias y vulnerabilidad a enfermedades como la tuberculosis o infecciones de transmisión sexual.
El protocolo se aplicará a los niños recién llegados, a los nacidos aquí hijos de inmigrantes y a quienes viajen al país de sus padres. En Catalunya hay 70.865 inmigrantes de entre 0 y 18 años.

VACUNACIONES
Este seguimiento, presentado ayer por la consellera de Salut, Marina Geli, pretende que los pediatras presten atención a los hábitos alimentarios de las familias inmigrantes, que por su cultura de origen consumen en ocasiones exceso de grasas o fécula. Salut quiere que se recomiende a las familias productos de la dieta mediterránea, a los que a veces son reacios por tener hábitos culinarios distintos.
El seguimiento no acaba ahí. Una de las principales pautas será insistir para que las familias inmigrantes cumplan con el calendario de vacunación de sus hijos. El documento apuesta por hacer a esos niños análisis minuciosos de enfermedades como la tuberculosis, el sida o la malaria, con mucha incidencia en algunos de sus países de origen.
Además, se prestará atención a síntomas relacionados con la falta de hierro o el raquitismo. También se pide a los pediatras que se fijen en indicios de que si a una menor se le ha practicado o se le va a practicar la mutilación genital. Además, preocupan las dolencias mentales generadas por el fenómeno migratorio.

CIFRAS DEL 2003
Geli presentó ayer el informe Indicadores de salud maternoinfantil en la población extranjera en Catalunya en 2003, según el cual el 16% del total de bebés nacidos en Catalunya ese año eran hijos de padres extranjeros. Esa cifra ya fue superada en el 2004, cuando el porcentaje de partos de niños que tienen al menos un padre extranjero alcanzó el 21% del total de alumbramientos.
Entre los datos nuevos que aporta el estudio destaca que las inmigrantes tienen un porcentaje menor de cesáreas que el de las catalanas, a las que sí superan ampliamente en el porcentaje de partos prematuros, que se supera el 15%, cuando el de las autóctonas es del 9,5%. Uno de los hábitos positivos de las madres extranjeras es que un 90% mantienen la lactancia materna, cuando en las catalanas ese porcentaje es del 80%. No obstante, se alertó de que un 40% de los partos de adolescentes son de inmigrantes.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)