La fuerza de la cultura gitana, en 'Romanipen'

Diario Vasco, 25-03-2006

SAN SEBASTIÁN. DV. Los gitanos, con su cultura mantenida durante mil años por todo el mundo, son los protagonistas de Romanipen, la película que se proyecta en la sesión de las 19.45 horas en el Principal. Se trata de un documental dirigido por Ima Garmendia y Kike del Olmo, quienes atravesaron 24 países para buscar las raíces de la cultura gitana en la India y hablar con gitanos de Finlandia y de Rumanía, de Eslovaquia, Macedonia o España.

«Queríamos romper los esterotipos que hay alrededor del gitano. Queríamos ver cómo viven, cómo han desarrollado su cultura, y cómo la han preservado a pesar de las dificultades. Hemos hablado con todo tipo de gitanos, desde políticos a gente que sufre la marginación». Y uno de los que tienen más papel en la película es Gabriel Moreno, «un barrendero que integra todos los elementos de la cultura gitana, y que representa cómo han sido capaces de mantener durante más de mil años esa cultura, sin tener una escritura propia, ni unos líderes internacionales que los unan. La han mantenido a través de la familia».

Romanipen cuenta todo eso a través de siete historias que se desarrollan en siete países. Los directores del filme fueron con su landrover, equipado con una cama en la parte de atrás, de un lugar a otro, conociendo a los gitanos, disfrutando de su hospitalidad. «Su sentido de la hospitalidad es impresionante, enseguida te invitan a pasar la noche en su casa», afirman. La voluntad de la película es ayudar a cambiar nuestra percepción, que cuando veamos a un gitano no pensemos en la idea esterotipada, porque como en todas partes, hay gente buena y gente mala».

Sabe bien de eso José Ramón Jiménez, el presidente de la asociación gitana Kamelamos Adiquerar: «La gente desconfía, constantemente tengo que demostrar que no voy a robar la cartera ni nada parecido. Mucha gente no conoce, y no quiere saber, pero se atreve a juzgar. No todos los gitanos somos iguales, en la diversidad está la riqueza, y también hay clases políticas, intelectuales, según los países, etcétera».

La asociación, cuyo nombre significa ‘Queremos hablar’ y vela por «los problemas de convivencia, la cobertura sanitaria, el trabajo y la cultura de los gitanos», contribuirá también esta tarde al debate correspondiente a la película Romanipen, en torno a las minorías étnicas. En el País Vasco hay actualmente unos 2.000 gitanos.

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