La Policía Nacional ha detenido a cinco presuntos miembros de un clan familiar búlgaro, asentado en Orihuela (Alicante), que obligaba a menores y adultos compatriotas a ejercer la mendicidad, en una operación en la que también han sido liberados dos hijos de los arrestados, ambos menores, y un hombre.
Según un comunicado de la Policía Nacional, los dos menores se encuentran en la actualidad bajo la custodia y protección en un centro de menores y el adulto bajo la asistencia de los servicios sociales.
Los arrestados – tres varones y dos mujeres, de entre 40 y 55 años, todos ellos de nacionalidad búlgara – se aprovechaban supuestamente de la precaria situación de compatriotas (adultos y menores de 12 a 16 años) para, mediante engaños, trasladarlos a España.
Tras llegar a nuestro país, los explotadores retiraban la documentación personal a sus víctimas, a las que coaccionaban y obligaban a mendigar por las calles, quitándoles luego todo el dinero ganado.
Si las víctimas intentaban marcharse, según la nota de prensa, eran agredidas físicamente.
Los cinco sospechosos están acusados de los presuntos delitos de trata de seres humanos con fines de mendicidad y de explotación de la mendicidad de menores.
A finales del pasado año, agentes de la Unidad contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental (Ucrif) de la Jefatura Superior de Policía de Murcia iniciaron una investigación sobre este clan familiar que, por distintos indicios, se dedicaba a la explotación de personas a las que obligaba a ejercer la mendicidad.
Esta agrupación familiar estaba alojada en una casa abandonada en un barrio de la localidad de Orihuela (Alicante), desde donde se trasladaba a Bulgaria para captar a sus víctimas: mayores y menores de edad en una precaria situación económica.
Posteriormente, las introducía en España usando la línea regular de autobuses, en concreto en Murcia, donde eran recogidas por otro miembro del clan que las llevaba hasta Orihuela.
En el registro practicado en la vivienda de esta localidad alicantina, los agentes capturaron a cinco presuntos integrantes del clan y liberaron a un ciudadano búlgaro, que había accedido a su traslado a España, bajo engaño, en compañía de cinco personas más, tres de ellas menores de edad.
También fueron liberados dos menores, hijos de los arrestados, que estaban siendo obligados a mendigar.
Además, la Policía halló en ese domicilio numerosa documentación, posiblemente de otras personas que se han visto obligadas a ejercer la mendicidad, extremo que se sigue investigando, así como útiles empleados para el robo y efectos que presentaban evidencias de haber sido sustraídos en alguna vivienda.
La investigación y posterior intervención ha sido desarrollada por la Ucrif de la Jefatura Superior de Policía de Murcia y la Ucrif de la Comisaría Provincial de Alicante.