Madrid – El Gobierno admitió ayer que conocía el documento interno de la
Guardia Civil de diciembre de 2005 que advertía de la muerte masiva de
inmigrantes en su camino de Mauritania a España. Sin embargo, por la
mañana el portavoz del PSOE en el Congreso, Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo
en Onda Cero «estar convencido» de que el informe no estaba en manos del
Ejecutivo. El reconocimiento oficial se hizo público por dos fuentes. Por
un lado, La Moncloa salió al paso haciendo hincapié en que el Ejecutivo
tiene en cuenta «todos los informes» y que se habían salvado 600 vidas de
enero a febrero fruto de la vigilancia española en aguas del Estrecho y
próximas a Canarias. En la nota interna de la Guardia Civil se aseguraba
que entre 1.200 y 1.700 inmigrantes procedentes de Mauritania habían
perdido la vida en aguas del océano desde comienzos del mes anterior. Esa
misma nota ya adelantaba las medidas que proponían las Fuerzas de
Seguridad mauritanas para atajar el problema, algunas de las cuales fueron
aprobadas ya por el Consejo de Ministros. De hecho, dos generales y un
coronel de la Guardia Civil volaron anoche rumbo a la capital de
Mauritania, Nuakchott, para ultimar los detalles de la primera patrulla
conjunta de lucha contra la inmigración ilegal, Por otro lado, el ministro
de Defensa reconoció ayer que la información recogida en la nota interna
de la Guardia Civil procedía del Centro Nacional de Inteligencia. José
Bono aseguró que el servicio secreto traslada siempre lo que conoce a las
autoridades competentes. «Sobre el contenido de la nota, no puedo hablar
sin cometer delito. Se trata de una nota clasificada», aseveró. Momentos
antes el titular de Interior eludió pronunciarse sobre si la Secretaría de
Estado de Seguridad conocía o no la nota. Por su parte, el presidente de
la Asociación Unificada de Guardias Civiles pidió ayer al Ministerio
Fiscal que investigue la supuesta muerte de los subsaharianos ahogados a
finales de 2005, de la cual, según indicó, tuvo constancia este Cuerpo. Y
el PP anunció ayer que pedirá la comparecencia de José Antonio Alonso en
el Congreso para que aporte datos acerca de la nota de la Benemérita.
Mientras, la marea de inmigrantes que intenta entrar en Europa vía
Canarias continuó ayer. Más de 120 subsaharianos indocumentados llegaron a
Tenerife a bordo de cayucos. Por ello, los Gobiernos de Canarias y
Mauritania acordaron ayer la elaboración de un Plan de Acción conjunto en
materia de política, económica y cultural. Asimismo, se creará un grupo de
trabajo permanente encargado de coordinar sus políticas de cooperación.