Los grupos municipales del PNV y el PSE exigieron ayer al equipo de gobierno que establezca «medidas» para evitar el hacinamiento de inmigrantes en pisos de alquiler por los que pagan hasta 450 euros por habitación, como publicó EL CORREO el pasado domingo. En varios casos, esos extranjeros comparten dormitorio con otros para rebajar esa renta, lo que por ejemplo ha provocado que veinte chinos vivieran en una vivienda de tres habitaciones de Zaramaga hasta que fueron descubiertos por la dueña.

Beatriz Artolazabal, del PNV, calificó estos episodios como «inaceptables» y dijo que el Ayuntamiento debe potenciar su detección del fraude. Peio López de Munain, concejal del PSE, criticó que haya propietarios «desaprensivos y desalmados que se hacen ricos a cuenta de la miseria de los inmigrantes. Hace tres años lo denunciamos y el problema sigue siendo urgente».

Por su parte, el titular de Asuntos Sociales, Miguel Ángel Echevarría, matizó que los casos de hacinamiento en pisos de alquiler «son muchos menos de los que había hace unos años».