El Consejo de Ministros acordó ayer pedir a la UE que libere fondos de emergencia para que Mauritania pueda gestionar con garantías la crisis migratoria e impida la llegada de nuevas oleadas de subsaharianos en pateras a las islas Canarias. La vicepresidenta primera aseguró este viernes que el Ejecutivo ya ha comenzado las gestiones con las autoridades de Bruselas para convertir las migraciones en una «prioridad» en las relaciones entre los 25 y el Gobierno de Nuakchot.

María Teresa Fernández de la Vega informó de la ofensiva diplomática internacional que el Gobierno ha puesto en marcha para recabar ayuda de terceros en la ya conocida como crisis de los cayucos y que este viernes se convirtió en tema central de la reunión del Consejo de Ministros. «Es un tema que también atañe a toda la comunidad internacional y a la UE, en particular», señaló la portavoz gubernamental, quién subrayó que esta ayuda de emergencia sería independiente de los dos fondos europeos ya existentes destinados al control de la inmigración en los países de origen. En el plano bilateral, la vicepresidenta confirmó que España enviará de inmediato a Mauritania las cuatro patrulleras prometidas. De la Vega matizó que los navíos no serán prestados, sino que será una «donación» a cargo de los fondos de cooperación.

Mientras tanto, a primera hora de la mañana llegó al puerto de Las Palmas de Gran Canaria el barco hospital Esperanza del Mar con los 25 cadáveres de los inmigrantes rescatados el miércoles en aguas próximas a Mauritania, en tanto que Salvamento Marítimo recataba dos nuevos cayucos procedentes de Mauritania, con casi un centenar de inmigrantes a bordo.

De otro lado, un barco del servicio de vigilancia costera de Mauritania interceptó ayer a unos 200 kilómetros al oeste de la costa de Nuakchot una patera que pretendía llegar a las islas Canarias con 24 inmigrantes clandestinos a bordo y que llevaba once días a la deriva, informaron fuentes oficiales.

Los inmigrantes, catorce de Mali, seis de Mauritania, tres de Senegal y uno de Gambia, carecían de alimentos y de agua, según explicó el comandante El Hacen Uld Ahmed, responsable de la operación de salvamento. Ahmed señaló que es la primera vez que una unidad de vigilancia costera intercepta una patera en esta zona, frente a las costas de Nuakchot.