pamplona – El vicepresidente de Política Sociales, Miguel Laparra, se felicitó ayer de que la Conferencia de Presidentes, a propuesta de Navarra, haya incluido en su agenda la política en materia de refugiados. Y es que el martes la presidenta Uxue Barkos trasladó al Estado a los presidentes autonómicos la necesidad de transformar el sistema de asilo y refugio para incrementar la capacidad de acogida y dar una mayor papel a las comunidades. Una petición que se “introdujo en la “agenda política” de la Conferencia de Presidentes, cuando en principio “no estaba previsto”, para a partir de ahora “potenciar la colaboración” y “la ayuda humanitaria”.

El vicepresidente añadió que esta iniciativa se enmarca en la política del Gobierno que sustenta el cuatripartito de potenciar la ayuda a personas refugiadas y de “agilizar” su llegada a Navarra, donde hay 50 plazas disponibles. Navarra defendió también y la Conferencia de Presidentes aceptó un pacto social y político por la Educación en el que las comunidades tengan un papel activo en el diagnóstico de la situación y en la presentación de aportaciones para mejorar la calidad del sistema y dotarle de estabilidad. Fuera de este asunto quedaron las posibilidades de convocar en 2017 ofertas públicas de empleo, un asunto pendiente de la decisión del Gobierno central sobre las tasas de reposición, que se podrían eliminar igual que para otras áreas.

Barkos ya adelantó el martes, al término de la Conferencia de Presidentes, que el Estado y Navarra discrepan de la cuantía de la aportación de la Comunidad Foral a las cargas generales, pero sin embargo, se mostró convencida de que abordan la negociación con voluntad de llegar a un acuerdo, “como siempre ha pasado”. – Efe