La Diputación de Gipuzkoa ya conoce de primera mano la situación que sufre Amal en Atenas. La delegación guipuzcoana que ha viajado hasta Grecia y que ha estado compuesta por Sara Pineda e Itziar Villalba, de la oenegé guipuzcoana Pasaportes para Siria, y el diputado de Relaciones Externas, Imanol Lasa, ha regresado satisfecha porque consideran que la visita ha permitido clarificar la situación de esta joven siria de 26 años y sus cinco hijos, víctimas de la violencia machista. Aún así, reconocen que hará falta «paciencia» y que la solución, que pasaría por su llegada hasta el territorio, podría retrasarse hasta el próximo verano.

Amal – nombre ficticio para preservar su seguridad – y sus cinco hijos viven en estos momentos una situación de «extrema vulnerabilidad» por su doble condición de refugiados. Y es que además de huir de la sangrienta guerra que está sufriendo Siria, también han sido víctimas de la violencia machista. Tras una brutal paliza que provocó que el pasado verano tuviera que ser ingresada en un centro hospitalario griego, en estos momentos la mujer y sus cinco hijos se encuentran incluidos en un programa de protección del gobierno griego.

«La hemos encontrado realmente ilusionada y agradecida. Pero su situación sigue siendo de riesgo total, porque a Amal y a la directora del centro les consta que el marido ha estado recientemente buscándola, preguntando en las oficinas, y porque los hijos, víctimas de la guerra y de malos tratos del padre, no disponen de la atención psicosocial imprescindible en estos casos a consecuencia de la barrera idiomática», explican Pineda y Villalba.

Desde que la Diputación tuvo conocimiento de mano de Pasaportes para Siria de la grave situación que está viviendo Amal, ambas entidades están trabajando codo con codo con el claro objetivo de que Amal pueda venir a Gipuzkoa cuanto antes. Así, este pasado fin de semana la delegación guipuzcoana se ha podido reunir además de con Amal con las abogadas del Consejo Griego de los Refugiados, que llevan su caso, y con la directora del centro en el que está acogida y la trabajadora social que la atiende. Además de exponerles con más detalles la situación actual de la joven siria y sus hijos, han tratado de acelerar los trámites para acogerles y aclarar su situación jurídica y analizar distintas vías para trasladarlos en el menor tiempo posible hasta Gipuzkoa.

Hasta marzo

El principal hándicap al que tienen que hacer frente es que Amal y sus hijos llegaron a Grecia unos días después de la firma del acuerdo entre la Unión Europea y Turquía, en marzo de este año, por lo que se quedaron fuera de los cupos de acogida acordados por los diversos gobiernos. Según ha podido saber la Diputación, su caso se examinará en marzo del año que viene, cuando le realizarán las primeras entrevistas. En ese momento se le podría reconocer como refugiada y tendría en su poder el pasaporte griego, que le daría derecho a viajar a otros países. Aún así, se está optando por estudiar otras vías, basadas en la vulnerabilidad y la excepcionalidad, ya que si no los pasos se dilatarían en el tiempo.

Además, el próximo 6 de febrero mantendrá un juicio por la custodia de sus hijos y el alejamiento de su marido por los malos tratos que ha sufrido. Desde la oenegé explican que la custodia provisional facilitaría separar los expedientes de Amal y sus cinco hijos del del marido, lo que califican como «un avance», pero el veredicto sin embargo podría tardar varios meses en producirse. En este caso, la joven siria cuenta con los informes médicos por maltrato, pruebas y el testimonio de la dirección del centro y de otra residente. Sus abogados consideran que existen muchas probabilidades de que se le pueda conceder la custodia provisional. Uno de los temores que existe entre los responsables de Pasaportes para Siria es que el marido pueda ser deportado a su país de origen y «al estar los expedientes juntos tengan que volver con él».

Entre las vías que pretende tomar la Diputación se encuentra la de preparar un informe con los recursos residenciales y psicosociales de los que dispone para acogerles en Gipuzkoa para hacérselo llegar a sus abogadas. Mientras, se baraja que Amal presente un escrito con su voluntad de ser acogida en Gipuzkoa y de recibir el visado humanitario. Además, se pondrá en contacto con oenegés y abogados con experiencia en estos casos y trasladará la petición a parlamentarios vascos en Madrid.