Pamplona. – Una manifestación, impulsada por las iniciativas “ciudades de acogida” de diversas localidades navarras y colectivos sociales, ha reivindicado hoy en Pamplona derechos para todas las personas y ha exigido a las instituciones “una acogida real e inmediata de las personas en tránsito”.

Coincidiendo con la celebración mañana del Día Internacional de las Personas Migrantes, la marcha ha recorrido este mediodía el centro de la capital navarra bajo el lema “Acogida real, ya! Benetako harrera orain! Migrantes, errefuxiatuak, ongi etorri! (Migrantes, refugiados, bienvenidos)”.

El derribo de un muro de cajas de cartón, con mensajes en favor de la libre circulación de personas frente a las vallas, alambradas y murallas que la impiden, ha marcado el inicio de la manifestación en la que se han coreado consignas como “abajo los muros de la vergüenza”.

Este acto, que se enmarca dentro de la XII Semana sobre Derechos Humanos y Migraciones que han celebrado diferentes colectivos y organizaciones no gubernamentales, ha contado con el respaldo de instituciones como el Parlamento foral, además de entidades locales, entre ellas Pamplona, sindicatos y organizaciones sociales.

Cada vez son más quienes se unen para trabajar en esta línea, según ha reconocido en declaraciones a los periodista Iñaki Redín, de Papeles Denontzat y Ciudad de Acogida de Iruñea, quien ha reivindicado el derecho a vivir de las personas que acuden a Navarra tanto por motivos políticos como por la guerra o por razones económicos.

“Reivindicamos todos los derechos para todas las personas al margen de la situación de la que partan y como estén”, ha aseverado, tras lo que ha exclamado que “ya está bien” y ha instado a los gobiernos a que se pongan a trabajar.

Al respecto ha insistido en que “no basta con buenas palabras” y como ejemplo ha citado que del cupo que se fijó para Navarra para acoger a 300 personas refugiadas “todavía no han llegado más que 17”, lo que ha denunciado.

Ha defendido el derecho a “andar y vivir libremente por el mundo”, tras lo que ha señalado que quienes acuden a Navarra necesitan el apoyo de la sociedad, a la que ha pedido que les acepte “tal cual son”.

Además ha demandado la rescisión del tratado de la Unión Europea con Turquía, detrás del cual ven “intereses económicos de grandes empresas que son las que están queriendo tener en Europa una clase trabajadora que viene de fuera sin derechos a la que poder explotar”.

Entre los participantes en la manifestación se encontraban personas refugiadas políticas como Saadat Baghirova, médico de Azerbaiyán, quien junto con su marido y dos hijos, se encuentra en Navarra dentro del programa de acogida de Cruz Roja.

En primera persona ha relatado las dificultades con las que se encuentran estas personas, con “muchísimos problemas con el alojamiento y con el trabajo”.

“Estamos aquí por un situación muy dura, no podemos vivir en nuestros países, estamos aquí por la guerra, por la situación política”, ha señalado, tras lo que ha precisado que no están aquí para pedir dinero, sino que quieren vivir como “todos los españoles”, en sus casas, con sus hijos, pagando sus gastos.

Al respecto y tras precisar que no tienen tantas diferencias con las personas de aquí, ha remarcado que lo que desean es integrarse.

Un mensaje similar ha lanzado el sirio Alix Sulaiman Ismail, quien ha insistido en que las personas refugiadas lo único que quieren es vivir y poder desarrollarse como personas.