El fiscal superior del País Vasco visita a 'los Pichis' en su casa de Ollerías
El fiscal superior, Juan Calparsoro, en el centro, acompañado de miembros de SOS Racismo.El fiscal superior, Juan Calparsoro, en el centro, acompañado de miembros de SOS Racismo. / EL CORREO Calparsoro propone una «mediación» ante un conflicto que «no tiene una solución fácil»
El Correo, , 29-11-2016El fiscal superior del País Vasco, Juan Calparsoro, visitó ayer la vivienda de ‘los Pichis’ en Ollerías Bajas, acompañado del portavoz de SOS Racismo Álava, Fede García, que ha iniciado una campaña en defensa de los miembros del clan que han ocupado una vivienda en el barrio vitoriano de Abetxuko. Calparsoro recibió el miércoles de la semana pasada la visita en su despacho de la matriarca de esta familia, que le invitó a que se acercara hasta su casa en Bilbao. Al igual que acudió a la llamada de los vecinos de Abetxuko, el máximo representante de la Fiscalía entró ayer a mediodía en la lonja donde reside parte del clan, en Ollerías Bajas número 6, en la capital vizcaína. En el encuentro estuvo también la pareja que se ha trasladado a Vitoria y sobre la que pesa una inminente orden de desalojo de la vivienda ocupada, además, por otros hijos y nietos de la conocida como ‘la faraona’.
«Mediación»
En conversación con este periódico, el fiscal superior, que también se ha entrevistado con representantes del Ayuntamiento de Bilbao para tratar sobre este asunto, se mostró dispuesto a recibir a los miembros de la plataforma contra la delincuencia en Ollerías y alrededores. Calparsoro aclaró que la visita no supone que se posicione de una parte o de la otra, y admitió que el conflicto «no tiene una solución fácil», por lo que propone intentar una «mediación».
Calparsoro llegó a advertir a los vecinos de Abetxuko de que podían estar incurriendo en un delito si caían en «insultos y coacciones» y afirmó que «las manifestaciones contra una familia en concreto para que se ausente de un sitio no son admisibles», lo que indignó a los afectados, entre ellos a la propietaria del piso ocupado, que quiere recuperar su propiedad.
Vecinos de Ollerías empezaron en mayo a denunciar los problemas de inseguridad y convivencia que estaban enturbiando el clima en el barrio y que atribuían a un clan familiar. Varios miembros, entre ellos menores, fueron detenidos por una veintena de robos en domicilios. Una decena de menores están tutelados por la Diputación de Bizkaia, pero se escapaban continuamente de los centros. La plataforma vecinal ha organizado cuatro manifestaciones. Las dos últimas se han celebrado en el barrio y han pasado por delante de la lonja en la que vive la familia.
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