¿Dónde puede haber un partido formado por inmigrantes judíos cercanos al marxismo clásico, irlandeses e italianos paupérrimos, agricultores que bordean simultáneamente el comunismo y el fundamentalismo protestante, y terratenientes neocoloniales que son dueños de vidas y haciendas y para los que las clases y razas inferiores son subhumanas?

En Estados Unidos. Es más: ése era el Partido Demócrata hace algo más de 100 años. El mismo Partido Demócrata de Obama y Clinton.

En EEUU no hay partidos a la española. Allí, bajo unas siglas, cabe casi todo. No hay aparato. No hay comité federal, ni presidente. En cada uno de los 50 estados, el partido va a su aire. Así que es como si hubiera 50 coaliciones, una por estado, de grupos heterogéneos. Pedir la disciplina de voto no es que sea difícil, es que ni siquiera se persigue.

Y, encima, el votante cambia poco. Así que cambian los partidos. El Partido Demócrata fue el de los defensores de la esclavitud, y su presidente más carismático fue durante décadas Andrew Jackson. Hoy, Donald Trump es el político más jacksoniano de EEUU y los republicanos son el partido de los blancos. Por si eso no bastara, el Congreso de EEUU no es un Parlamento, no hay tradición de debates, y las leyes se aprueban con pactos entre caballeros (pacto entre caballeros puede ser sustituido por intercambio de favores).

Para tratar de entender ese caos, aquí va una guía simple de las tribus del Partido Demócrata y Republicano, organizadas en orden de menor a mayor lealtad a la marca política a la que teóricamente pertenecen.

REPUBLICANOS. 1. RINOS. Suena como rhino, que es rinoceronte, pero son las siglas en inglés de Republicanos Sólo de Nombre. Son los republicanos moderados, una especie casi en peligro de extinción. El Partido Republicano lleva girando a la derecha desde hace cinco décadas.

2. REPUBLICANOS DE CLUB PRIVADO. Son como los rinos, pero en rico y educado. Los Rockefeller o los Bush hasta que llegó George W. Una subtribu que ha logrado escapar de la aniquilación son los neoconservadores, que tienden a ser intelectuales y a favorecer el intervencionismo en política exterior. Pocos, pero muy influyentes intelectualmente.

3. LIBERTARIOS. En España se les llamaría ultraliberales. Sueñan un mundo sin Estado y sin bancos centrales (sólo con bitcoin y otras criptomonedas on-line). Tienden a ser jóvenes, y sus territorios de caza son los estados del Oeste. Siempre están a punto de irse con el Partido Libertario, pero en el último momento les vence el concepto del voto útil y votan, a regañadientes, republicano.

4. CONSERVADORES FISCALES. Los republicanos siempre han sido el partido de la austeridad aunque, en realidad, ellos lo que quieren es recortar los impuestos y dejar el gasto igual. También han sido el partido del libre comercio. Eso hasta que llegó Trump y vendió con éxito la idea de más Estado y menos comercio. Eso ha dejado a parte de esta tribu en una crisis de fe total.

5. CONSERVADORES SOCIALES. Son el grupo que mejor ha sobrevivido a la toma del partido por Trump, debido a que se han rendido con armas y bagajes a él. Como gente que no acepta el aborto, el matrimonio homosexual, ni el sexo antes de casarse se han podido emocionar con Trump. Dentro de esta tribu, la más importante es la de los evangélicos, muy fuertes en el sur y el oeste.

DEMÓCRATAS. 1. DEMÓCRATAS DE REAGAN. Obreros industriales, a menudo afiliados a sindicatos profesionales. De izquierdas en lo económico; de derechas en materia social. Empezaron a irse con Reagan y Trump ha tenido un éxito más que considerable con ellos. Los demócratas sólo mantienen el control sobre esta tribu gracias a los sindicatos.

2. BLACK LIVES MATTER. Son los alternativos. El 15-M estadounidense, pero con un toque muy racial –sus enemigos dicen que racista– afroamericano y, en menor medida, latino. Son jóvenes, y están enfrentados a todo el mundo, incluyendo a los líderes tradicionales de sus comunidades, que son mucho más conservadores que ellos. Son un poco como los libertarios republicanos, en el sentido de que su fidelidad primordial es a una serie de principios ideológicos abstractos salvo cuando se trata de evaluar diferentes variedades de marihuana, en cuyo caso pueden llevar a cabo análisis de una precisión asombrosa.

3. PROFESIONALES URBANOS. En EEUU sucede una cosa curiosa: el Partido Demócrata tiende a llevarse los votos de la gente menos educada y de la más educada. En 2016, la proporción del voto de personas con un nivel cultural alto que fue a Trump podría haber caído a un nivel récord.

4. NEGROS CONSERVADORES. Los afroamericanos tienden a ser la gente más conservadora de EEUU, al menos en cuestiones sociales. El problema que tienen es que a los blancos conservadores no les gusta la gente con mucha melanina. Así que caen del lado demócrata.

5. HISPANOS. Como dijo Reagan, «los latinos son republicanos, pero aún no lo saben». Entre un partido que piensa como ellos, pero les odia –el Republicano– y otro que está en las antípodas ideológicas, pero les tolera –el Demócrata– lo tienen fácil.