GINEBRA. Al menos 3.740 inmigrantes y refugiados han perdido la vida cuando intentaban cruzar el mar Mediterráneo con destino a Europa, una cifra que se aproxima a la de víctimas mortales de 2015 a pesar de que ese año realizaron la travesía el triple de personas, según las estimaciones del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

William Spindler, portavoz de ACNUR, ha informado de que este año han viajado por el mar Mediterráneo 327.800 personas y han perecido en la travesía 3.740, frente a las 3.771 que murieron el año anterior, cuando se embarcaron hacia las costas europeas más de un millón de personas.

“Esto es de lejos lo peor que hemos visto en el Mediterráneo”, ha asegurado Spindler, en un encuentro con la prensa en Ginebra. “Podemos decir que el porcentaje de muertes ha aumentado al triple”, ha asegurado.