para reforzar la seguridad

Londres levantará un muro resbaladizo en Calais para frenar a los inmigrantes

El “nuevo y gran muro”, como lo definió Theresa May, tendrá cuatro metros de altura y un kilómetro de longitud

Deia, Rita Álvarez Tudela, 08-09-2016

El gobierno de Theresa May anunció ayer que Reino Unido construirá un “nuevo y gran muro” de cuatro metros de alto y de hormigón resbaladizo para impedir que más inmigrantes y refugiados entren a su territorio desde el campamento francés de Calais. Este proyecto forma parte de un paquete de medidas conjuntas tomadas por las autoridades anglo – francesas para reforzar la seguridad en el punto fronterizo de Calais. Con un kilometro de longitud a lo largo de la principal vía de acceso al puerto, está previsto que su construcción comience este mes y que termine en diciembre. Se suma así a otras vallas que se han construido para proteger el puerto, la terminal del Eurotúnel y las vías del tren de la zona.

Con un coste aproximado de 2,3 millones de euros, en palabras del Secretario de Estado británico para Inmigración, Robert Goodwill, el muro estará a ambos lados de la carretera de Rocade. En un anuncio hecho en una comparecencia en el Parlamento en Londres, informó de que estará compuesto de cemento resbaladizo en un intento de hacer más difícil su escalada. Además, contará con plantas y flores para reducir su impacto visual en el área local.

Para Goodwill, la construcción es la única forma de atajar el hecho de que “la gente siga entrando”, pues hasta ahora las vallas no han funcionado, por lo que ahora ve en el muro la única forma de atajar el problema. Además, también defiende que protegerá a los camiones y otros vehículos que tratan de cruzar la frontera y que sufren episodios violentos con ataques con piedras, troncos de árboles y carritos de la compra, entre otros objetos.

Este político británico subrayó como “todavía hay mucho por hacer”, pero destacó como por el momento ya han invertido en un espacio para que 200 camiones tengan un lugar seguro para esperar en Calais. Reconoció que debía hacer una visita a la zona para ver con sus propios ojos las condiciones en el campo de refugiados conocido como La Selva, y señaló que irá en cuanto pueda, pero no quiso prometer una fecha a los parlamentarios que le pedían día y mes.

El ministro conservador defendió las ayudas de Londres a los niños refugiados en el campo de Calais, diciendo que estaban tratando de acelerar el proceso. Sin embargo, reconoció como desde su nombramiento en julio, sólo había tenido una larga conversación sobre el tema con Lord Dubs, el parlamentario encargado de este asunto.

Por su parte, el secretario del Interior británico, Ambar Rudd explicó a sus compañeros parlamentarios, como si bien el Reino Unido proporciona el dinero para ayudar a mantener la seguridad en Calais, la palabra final la tienen las autoridades francesas para decidir qué medidas poner en marcha.

“un nuevo muro de berlín” Los residentes locales ya han puesto el grito en el cielo, comparando su propuesta como si se tratase del muro de Berlín del siglo XXI. De hecho, François Guennoc desde la ONG Auberge Des Migrantes que trabaja en Calais, asegura que este muro es la última extensión a los kilómetros de cercas y vigilancia de seguridad ya existentes. “Cuando se ponen vallas en cualquier lugar del mundo, la gente encuentra la forma de traspasarlas. Es un desperdicio de dinero. Puede suponer un mayor peligro para la gente, hacer subir las tarifas de los traficantes de gente y la gente terminará por correr un riesgo más alto”, lamentó Guennoc. Otra asociación que no puede creerse la medida es Save the Children. Steven McIntosh, uno de sus portavoces en la capital británica, la criticó citando a los niños y los jóvenes desesperados que tratan de escapar del campo para llegar a un lugar seguro y una vida mejor. “Es vital asegurarnos de que las medidas de seguridad establecidas en Calais no pongan en peligro sus vidas, empujando a actuar a los contrabandistas y a los traficantes de personas”, advirtió.

Por su parte, la Asociación del Transporte por Carretera reconoció que se hará un mal uso del dinero de los contribuyentes, pues defienden que el dinero dedicado al muro sería mejor si fuese empleado para aumentar la seguridad a lo largo de las carreteras de la zona y no en la construcción de este perímetro cerrado.

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