El principal partido de la oposición griega, el conservador Nueva Democracia (ND), criticó hoy al Gobierno por las condiciones que “amenazan la salud pública” en el campo de refugiados instalado en el antiguo aeropuerto de Ellinikón, donde todavía hay 910 personas.

En un comunicado, ND destacó que el ministro griego de Migración, Yannis Muzalas, “aseguró que el 20 de junio (Ellinikón) estaría vacío”, pero “han pasado 90 días y la situación es cada vez peor”.

“Ayer mismo se supo que el sótano del antiguo aeropuerto (al sur de Atenas) se ha convertido en un ‘lago’ de aguas sucias y residuales”, afirmó el partido conservador, para añadir que “ahora todo el mundo puede sacar sus propias conclusiones acerca de la incompetencia de este Gobierno”.

Tras dos exámenes efectuados el 25 y el 26 de agosto en ese campo de refugiados, el Centro de Control y Prevención de Enfermedades (KEELPNO) certificó ayer que se encontraron “fallos en el sistema hidráulico y de alcantarillado” que ha llevado al “estancamiento de aguas residuales”.

KEELPNO instó al Gobierno a “reparar los daños y cubrir las necesidades de la población” del campo, “que necesita un número suficiente de instalaciones sanitarias individuales como aseos, duchas y fregaderos”.

Advirtió de que, si no se aplican estas recomendaciones, “hay riesgo para la salud pública”.

El jueves, tras una visita de tres días a Grecia, el alto comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi, hizo un llamamiento al Gobierno de Atenas para que mejorara las condiciones de varios campos, especialmente de cara a la llegada del invierno.