La tragedia de la inmigración en las costas andaluzas no cesa, por más que la eclosión de la llegada de refugiados a Grecia e Italia parezca minimizarla. En las últimas horas un centenar de personas fueron rescatadas en cuatro pateras a punto de naufragar en aguas del mar de Alborán y del Estrecho y en Algeciras la Guardia Civil daba cuenta de un incidente que pone de relieve la crueldad de las mafias que se dedican al tráfico de personas. La Benemérita, en colaboración con la Gendarmería marroquí busca en el vecino país al conductor de una moto acuática que arrojó al mar a los dos inmigrantes marroquíes que llevaba a bordo. Uno de ellos no pudo ser rescatado con vida.

El paso del Estrecho en moto acuática es una de las tarifas más caras para cruzar la frontera sur, pero eso no garantiza el éxito. En este caso, a unos 150 metros de la orilla el ‘motero’ obligó a saltar al mar a los dos inmigrantes que transportaba en Punta Rodeo, Algeciras, y viró hacia alta mar rumbo a Marruecos.

Dos agentes de la Guardia Civil que patrullaban la zona por haber recibido aviso de la aparición de la moto de agua vieron a los hombres caer al agua. Uno de los guardias se tiró al mar para auxiliar a uno de los inmigrantes, en unas condiciones de fuerte resaca y cambio de mareas, y logró salvarlo, mientras que el otro tripulante de la moto de agua no fue encontrado, pese a que se puso sobre aviso a una patrullera que rastreó la zona durante horas. El cadáver apareció días después en la playa.

En las últimas horas el tránsito de migrantes se intensificó en aguas andaluzas, en especial hacia Mar de Alborán, una ruta menos vigilada por la Marina Real marroquí que, en cambio, sí actúa e intercepta las pateras que parten hacia el Estrecho, donde además ha entrado en vigor la Operación Minerva, organizada por Frontex. Salvamento Marítimo y la Guardia Civil actuaron durante toda la noche del martes para rescatar en total a 87 tripulantes de tres pateras que fueron llevadas a Almería por la Salvamar Polimnia. Por la mañana, Salvamento Marítimo rescataba y trasladaba a Tarifa a diez personas, en una ‘toy’.