El pasado mayo, Wissam Alnawaji fue operado en el Hospital Universitario 12 de Octubre. Ahora en agosto, se puede asegurar con rotundidad que esa operación fue un éxito porque este niño sirio ya puede caminar sin muletas y regresar a Jordania. En Ammán, la capital jordana, se volverá a reunir con su familia y seguirá las sesiones de rehabilitación hasta su completa recuperación.

La operación pretendía mejorar la movilidad de la pierna izquierda y modificar el muñón de la derecha. La nueva prótesis para la pierna derecha le está permitiendo mantenerse de pie sin ayuda de muletas y dar sus primeros pasos hacia una nueva vida lo más autónoma posible.

Wissam es un niño sirio, de 15 años. A principios de 2014 huyó a Jordania con su familia tras sufrir un bombardeo en el que perdió la pierna derecha. Cayó una bomba mientras jugaba con sus amigos. Él tuvo suerte porque estaba un poco retrasado y no murió.

Desde entonces estaba siendo atendido en un centro de Ammán especializado en terapias de rehabilitación para niños víctimas de la guerra, centro que cuenta con el apoyo de la ONGGlobal Humanitaria. Fue esta ONG la que consiguió que viniera a Madrid para ser operado. Durante este tiempo se ha mantenido en contacto con su familia, que está al tanto de todos sus avances y ahora por fin se pueden reunir de nuevo.

Cerca de dos millones de niños y niñas han abandonado Siria por culpa de la guerra que vive el país desde 2012. La mayoría de ellos llegan a los lugares de acogida enfermos, con problemas físicos o psicológicos, en algunos casos muy graves, con miembros mutilados por las explosiones, parálisis cerebral o estrés postraumático.