De convento para monjas a refugio para los que lo necesitan

Diario Sur, , 03-07-2016

Llevaba dos años sin uso, cuando las monjas de la Orden de las Mínimas marcharon a la vecina Archidona para fusionar ambas comunidades. Por eso las religiosas siguieron el dictado del Papa Francisco sobre la necesidad de prestar ayuda al refugiado y cedieron el convento de Santa Eufemia al Obispado para apoyar la causa. Tras el acuerdo con CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado), este espacio histórico en el corazón de Antequera abrió de nuevo sus puertas reconvertido en un refugio. De aquello ha pasado justo un mes – se puso en marcha el pasado 1 de junio – y en él hay disponibles 38 plazas, que en la mayoría de los casos quedan reservadas para familias con niños. En la actualidad, el centro presta servicio a una veintena de personas y para la semana que viene se espera la llegada de dos nuevas familias: una colombiana y otra ucraniana.

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