La Comisión de Ayuda al Refugiado (CEAR – Euskadi) ha destacado quela CAV ha ofertado un total de 200 plazas de acogida a refugiados, pero ha asegurado que esta cifra es muy baja y que tiene capacidad para recibir «a muchos más».

La directora de CEAR – Euskadi, Patricia Bárcena, ha comparecido para dar a conocer el informe sobre las solicitudes de asilo en estos tres herrialdes, referido a 2015 y los primeros meses de 2016.Según sus datos, en 2015 se tramitaron 163 solicitudes (132 en Bizkaia; 17 en Gipuzkoa, y 14 en Araba) frente a las 99 presentadas en 2014. Durante el año pasado no se registró ninguna concesión de estatuto de refugiado. La mayoría de estas personas procedían de Ucrania (41), Nigeria (23), China (15) y Venezuela (14).Hasta el 4 de mayo de 2016 se habían tramitado un total de 106 solicitudes, procedentes, en su mayoría, de ciudadanos de Venezuela (24); Ucrania (11), Siria (10) y Nigeria (9).En función de los datos aportados por CEAR, hasta ahora, han llegado a la CAV 21 personas (quince eritreas y seis sirias) en el marco del programa de reubicación de personas refugiadas que ya están en Europa. En el caso del plan de reasentamiento, dirigido a personas refugiadas en países limítrofes a los países de origen, CEAR – Euskadi tiene reservadas doce plazas «para cuando lleguen los primeros cupos».Bárcena, ha explicado que, debido a «la falta de eficacia del programa de reubicación, las personas refugiadas están llegando por su cuenta» y, de hecho, esta organización «recibe diariamente personas refugiadas de muchos países del mundo que llegan por sus propios medios».Por ello, ha realizado un llamamiento a las instituciones a «no generar personas refugiadas de primera y de segunda» y a atender las peticiones de «todas las personas que tengan necesidad de protección internacional, independientemente de su origen, sexo o religión».Bárcena ha lamentado que «se recibe un porcentaje ínfimo de las personas que buscaron protección internacional en Europa, ya que hay capacidad y voluntad ciudadana para acoger muchas más personas, lo que no hay es voluntad política». También ha pedido que se garantice que todas las personas refugiadas que lleganpuedan acceder a los servicios y recursos públicos con independencia de su origen y de la vía de entrada que hayan utilizado.