n la boda de Amadou Diallo y Bintu Ana Jalloh en Costa Calma, los ritos de Europa y África, la tradición y la modernidad, se entremezclaron. La Asociación de Amigos y Simpatizantes de Guinea Conakry (Adgas)supervisó los detalles de una celebración a la que nada más llegar invitaban a elegir entre kurubana o papas con mojo, rigras o gofio amasado.
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La boda de Amadou Diallo y Bintu Ana Jalloh, ambos naturales de Guinea Conakry, en realidad se divide en tres actos: la ceremonia religiosa musulmana de la mañana, la celebración de la tarde-noche y la ceremonia civil a realizar el próximo mes de junio. La comunidad africana de Fuerteventura, fundamentalmente guineana y senegalesa, sacó sus mejores galas este fin de semana para celebrar un matrimonio entre lo tradicional y la modernidad con ritos, ropajes y comidas de un continente y de otro.

En la celebración, la novia (18 años, estudiante de segundo de Bachillerato y nacida en Costa Calma) lucía el traje típico europeo. El novio (23 años y residente en Londres donde trabaja en hostelería y estudia) también se enfundó en un traje con corbata. A su lado, ocho damas de honor optaron por trajes largos al más puro estilo también del viejo continente. Los arropaban los invitados que en su mayoría optaron por el wax, esto es la vestimenta tradicional de África, con su traje largo y pañuelo en la cabeza en el caso de las mujeres .

Entre los invitados, Mor Diaw (Senegal, 1977) y Mónica María Rodríguez (Ourense, 1968) simbolizaban mejor que nadie la unión de dos culturas, dos religiones y dos países. Se conocieron en Galicia, donde se casaron hace casi cinco años, y residen desde hace dos en Costa Calma. «Para nosotros es más cómodo vivir aquí porque la comunidad senegalesa es acogedora y la isla tiene más oportunidades de trabajo».

Mientras el imam de Costa Calma, Fouad Hamami, reza con las manos levantadas al inicio de la celebración de la boda que comenzó por la tarde y terminó por la noche, los niños corretean entre las mesas como en cualquier boda, por mucha cultura y religión que las distinga. Mohamed Hafize Bah, cabeza visible de la Asociación de Amigos y Simpatizantes de Guinea Conakry, que funciona desde 2010 en Fuerteventura, invita a un refresco o un vasito de foleré, «es casero y no tiene alcohol».