El Ayuntamiento de Barcelona ha desalojado un asentamiento en el que vivían una veintena de inmigrantes en el barrio del Poblenou, en el distrito de Sant Martí, según ha informado a Europa Press el consistorio.

Se trata de un solar situado en el número 126 de la calle Pamplona, a pocos metros de los nuevos Encants Vells y el elegante Teatre Nacional de Catalunya. En ella vivían entre 15 y 20 personas, de origen senegalés y magrebí principalmente, y se ha desalojado “por motivos de seguridad” según el consistorio. Buena parte de los residentes se ganaba la vida precariamente mediante la recogida de chatarra y la venta ambulante.

La nave está, de hecho, muy cerca del peligroso agujero por el que un grupo de sintecho accedía a la estación abandonada de Marina Bifurcación, incendiada el febrero y causante de un polémico caos en toda la red de Cercanías. El caso puso de relieve las condiciones infrahumanas en las que vivían los supuestos causantes del fuego, que no habían encontrado cobijo en esta nave de la calle Pamplona ni en otra que habían intentado ocupar sin éxito. Sin el auxilio del asentamiento ilegal, acudieron a la vieja – y muy sucia – estación ‘fantasma’. Al presenciar el alboroto causado por la extinción del incendio en las instalaciones de Adif, uno de los residentes en esta nave de la calle Pamplona ya expresó a los medios su preocupación por un desalojo colateral de su asentamiento.

El consistorio ha asegurado que los servicios sociales vienen trabajando con estas personas desde hace tiempo, y este lunes hicieron una primera entrada en el solar para proceder al desalojo, que ha finalizado la mañana de este martes. Les ha ofrecido un servicio de guardamuebles para sus objetos personales y alojamiento provisional, aunque por ahora no ha cuantificado cuántas personas se han acogido a estos servicios. En el operativo ha colaborado la Guardia Urbana y los servicios sociales y jurídicos del Ayuntamiento, además de una ambulancia.