Nadie sabe con certeza cuántos refugiados han muerto buscando asilo las aguas de Grecia desde que hace cinco años estallara la guerra que asola Siria. De los refugiados se sabe poco, muy poco, excepto que son tantos y tienen tantos problemas que no vacilan a la hora de confiar su vida y la de sus seres queridos a la inestabilidad de una barca neumática, a la voluntad de las olas y a la ferocidad del viento.

Según la Agencia de Refugiados de la ONU (ACNUR), en lo que va del 2016 han perdido la vida cerca de 1.261 personas y 3.700 personas lo hicieron a lo largo del 2015. No son pocas las iniciativas que han surgido en respuesta a estas cifras. Proactiva Open Arms es una de ellas. Esta oenegé badalonesa, cuyo responsable Óscar Camps fue galardonado con el premio ‘Català de l’Any’, ha consolidado su presencia en la isla de Lesbos, en el mar Egeo, con un equipo permanente de 14 profesionales en salvamento de emergencia, distribuidos en dos puntos de llegadas estratégicos ante las rutas cambiantes: Skala, en el norte, y Mitiline, en el sur de la isla.

La iniciativa, que nació con una inversión de 15.000 euros aportados por los propios voluntarios y sin ningún tipo de ayuda pública, inicia ahora una nueva etapa de recaudación con la Rosa Salvavidas. Esta propuesta pretende recaudar fondos durante el día de Sant Jordi mediante la venta de rosas virtuales, con las que seguir sufragando su presencia y acciones de rescate en el Egeo.