La UE paró los rescates en el Mediterráneo sabiendo que habría muchos más muertos
La Vanguardia, , 19-04-2016La Unión Europea
sabía que aumentarían las muertes en el Mediterráneo y aun así liquidó la misión de rescate Mare Nostrum, que encabezaba Italia, el 31 de diciembre del 2014. Se retiraron barcos de socorro y se dejó únicamente en funcionamiento la misión de vigilancia Tritón, con menos recursos y actuando más lejos de las costas de Libia y Egipto.
Un informe interno y hasta ahora inédito de Frontex, la agencia europea para el control de fronteras, decía: “Hay que remarcar que con la retirada de recursos navales , si no se planea bien y se anuncia con tiempo suficiente, resultaría en un número de víctimas mucho mayor”. Por una parte, las pateras tendrían que navegar “durante varios días antes de ser rescatadas o interceptadas”. Por otra, se dejaba la responsabilidad de los rescates a buques mercantes, que ni tenían las habilidades ni las capacidades para llevarlos a cabo.
El documento de Frontex ha sido revelado por investigadores de las universidades de Londres y Nueva York, cuyas conclusiones fueron publicadas ayer lunes, precisamente horas antes de que se tuviera noticia del naufragio de una o varias embarcaciones procedentes de Egipto con más de 300 personas. El informe, titulado
Muerte por rescate. Los efectos letales de las políticas de la UE de no asistencia en el mar
, destaca cómo en una sola semana de abril del 2015 dos rescates a cargo de mercantes acabaron en los peores naufragios vividos en el Mediterráneo: 400 muertos el 12 de abril y 800 muertos el día 18.
La reconstrucción de los hechos ocurridos en estos naufragios utilizando técnicas avanzadas de oceanografía forense permite afirmar, según los autores del informe, Charles Heller y Lorenzo Pezzani, que los buques mercantes hicieron todo lo que pudieron y cumplieron con sus obligaciones, pero “estaban muy poco preparados para hacerlo”. Al transferir el peso de los rescates a los mercantes, “las agencias y los políticos de la UE crearon conscientemente las condiciones que llevaron a la pérdida masiva de vidas”.
Según Statewatch, que ha divulgado el informe, sus resultados son de particular relevancia ante la situación actual en el Mediterráneo central, donde está aumentando de nuevo el flujo de pateras. Los gobiernos europeos consideraban que Mare Nostrum constituía un “efecto llamada” que animaba a la gente a hacer la peligrosa travesía porque sabía que sería rescatada. Si de verdad creían su propio argumento es algo que debería ser objeto de estudio aparte…
El cierre de Mare Nostrum provocó temores y críticas de organizaciones de derechos humanos y de europarlamentarios, pero sin éxito. Pocos días después de la muerte de 800 personas frente a las costas de Sicilia, el presidente de la Comisión Europa, Jean – Claude Juncker, reconoció ante la Eurocámara que “fue un error serio acabar la operación Mare Nostrum . Costó vidas humanas”.
El investigador Charles Heller discrepa: “¿Podemos de verdad calificar el fin de Mare Nostrum y su sustitución por Tritón, con pleno conocimiento de sus consecuencias, como un error? Yo más bien diría que fue un caso de negligencia deliberada, y que los políticos europeos y Frontex son culpables de homicidio por omisión”
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