La Policía macedonia vuelve a emplear gases lacrimógenos

Diario Sur, DARÍO MENOR CORRESPONSAL , 14-04-2016

Los alrededor de 11.000 inmigrantes y refugiados atrapados en el campamento de Idomeni, junto a la frontera entre Grecia y Macedonia, no se resignan a su suerte. Ayer un grupo de unos 30 muchachos trataron de saltar la valla de alambre de espino sirviéndose de mantas, pero fueron rechazados por las fuerzas de seguridad de esta antigua república yugoslava. Los agentes dispararon botes de gas lacrimógeno y granadas aturdidoras. A diferencia de lo ocurrido el pasado domingo en un enfrentamiento similar, en esta ocasión no se registraron heridos. Tras los choques entre inmigrantes y policías macedonios de hace cuatro días 237 personas tuvieron que ser atendidas por los sanitarios.

La situación es algo más tranquila en El Pireo. Después de varios días negándose a abandonar el lugar para dirigirse a los campamentos montados por el Gobierno griego, varios cientos de personas accedieron ayer a marchar en los autobuses ofrecidos por el Ejecutivo.

El otro punto caliente de la inmigración en Grecia es la isla de Lesbos. Durante la audiencia general de ayer, el Papa se refirió a su viaje del sábado a esta isla. Dijo que con la visita quiere mostrar su «cercanía y solidaridad» con los refugiados y agradecer a los griegos la «generosa acogida» que les brindan. Son los mismos mensajes que transmitió en Lampedusa, cuando visitó esta isla italiana en julio de 2013.

Aunque ayer fue un día relativamente tranquilo en el Canal de Sicilia, pues sólo hubo que socorrer a 121 personas que se dirigían hacia las costas italianas tras zarpar desde Libia, Roma teme un gigantesco éxodo durante los próximos meses. El general Paolo Serra, asesor militar del enviado especial de la ONU para el país norteafricano, Martin Kobler, aseguró que en Libia hay hasta un millón de personas que podrían emigrar hacia Europa a través del Mediterráneo central.

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