la capitalidad cultural europea 2016

San Sebastián 2016 se pregunta: “¿Cómo ser capital cultural de una Europa así?”

La ciudad donostiarra programa 50 actos culturales con más de 200 artistas para reclamar "una posición activa frente a las guerras"

El País, Mikel Ormazabal , 26-03-2016

A San Sebastián le ha tocado gestionar la capitalidad cultural europea en uno de los momentos más delicados para el continente, en plena crisis humanitaria de los refugiados sirios y aún bajo los efectos que han dejado los trágicos atentados terroristas en Bruselas. “Es difícil celebrar Europa en este contexto. Es difícil impulsar la cultura para la convivencia en una Europa que toma por enemigos a quienes llegan solicitando protección; ¿cómo ser la capital de la cultura de una Europa como esta?”. Lo dice la declaración institucional que San Sebastián 2016 va a remitir a la Comisión Europea por la respuesta que las autoridades comunitarias han dado a los huidos de la guerra.

“¿Cómo ser la capital de la cultura de una Europa como esta?”. La respuesta a esa pregunta es el Festival Stop War, “un grito contra las guerras” que estos días forma un mosaico gigante de actividades culturales en las que intervienen, hasta este domingo, más de 200 artistas. “San Sebastián quiere ser la capital de la cultura de una Europa que actúa con solidaridad y responsabilidad”, ha leído este sábado Pablo Berástegui, el director de la capitalidad donostiarra, porque “difícilmente impulsaremos la cultura para la convivencia en esta Europa que no cumple con la Declaración de Derechos Humanos y la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, en el viejo continente que da la espalda a la injusticia que sufren las mujeres y hombres, niñas y niños que llegan a nosotros en busca cobijo”.

Es parte del manifiesto antibelicista que San Sebastián 2016 quiere trasladar a la sociedad y cuya expresión artística se manifiesta a través de más de medio centenar de actuaciones musicales, teatro, artes escénicas, magia… que van desplegándose a lo largo del río Urumea y los puentes que lo atraviesan y simbolizan la cultura de la convivencia y el entendimiento entre diferentes. Los responsables de la capitalidad lamentan que esta ciudad tenga que afrontar el reto de ser la capital de la cultura de un continente que “en lugar de tender puentes y abrir puertas, construye muros y subraya fronteras”. Por ello, apelan a no dejar pasar la oportunidad de “apelar a los valores fundamentales de una unión solidaria, inclusiva y justa, como se hace en el programa cultural de la capitalidad”.

Con esa idea de una Europa que une a las personas, “las acoge, sin importar su procedencia, cuando más lo necesitan” se ha gestado el festival Stop War, que se abrió este viernes con el concierto de la cantante franco – maliense Inna Modja. La velada de este sábado arrancará con los guipuzcoanos Gose, tras los cuales actuará el rockero británico Bob Geldof, mientras que la del domingo correrá a cargo del veterano Nick Lowe, que tendrá como telonero al grupo vasco Esne Beltza.

La programación cultural combinará el ocio y la reflexión, con el fin de abordar, entre otros temas, los retos actuales del antimilitarismo o las maneras de promover una cultura de paz en la sociedad actual. Aunque fuera de cartel, San Sebastián 2016 también ha echado una mirada a la crisis de los refugiados sirios.

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